Los nadadores amigos de Lochte declararon que el robo no existió
El jefe de la Policía Civil, Fernando Veloso, afirmó que los nadadores americanos que declararon este jueves (18) confesaron que el grupo de atletas no fue asaltado la madrugada del pasado domingo (14), cuando volvían de una fiesta.
La versión de que habían sido víctimas de un robo fue difundida por el campeón olímpico Ryan Lochte.
Los nadadores americanos Gunnar Bentz (20) y Jack Conger (21) prestaron declaración en la Comisaría Especial de Atención al Turista, en la zona sur de Río.
A Bentz y Conger la Policía Federal les impidió dejar el país en la noche del miércoles (17). Los policías bajaron a los dos nadadores de un vuelo con destino a Estados Unidos. Inicialmente, se habían negado a declarar.
Los nadadores prestaron declaración por más de tres horas y se retiraron sin hacer declaraciones a la prensa.
La policía todavía está esperando que el nadador Jimmy Feigen (26), que también estaba con el grupo y dijo haber sido asaltado, preste declaración.
La versión original de los nadadores es refutada por la policía de Río, que cree que los atletas estuvieron involucrados en una pelea cuando volvían a la villa olímpica, en la mañana del domingo (14), y que no hubo asalto.
El hecho tuvo lugar en una estación de servicio en Barra da Tijuca, en la zona oeste de Río. Ellos habrían orinado las paredes y destruido el baño del lugar.
El jefe de la policía dijo que los nadadores pueden responder por falso testimonio y vandalismo, si se comprueba que ellos destruyeron el baño de la estación de servicio.
La falsa comunicación de un delito implica detención de uno a seis meses o el pago de una multa.
"Todavía es pronto para atribuir los delitos a los nadadores. La investigación aún no terminó", afirmó Veloso.
Hasta el momento, no se sabe por qué Lochte habría mentido en su declaración.
"Tal vez para preservar una relación. No sé. Todavía esta información no está en la investigación", afirmó el jefe de la policía.
Lochte se fue de Brasil el lunes (15) y volvió a Estados Unidos.
Traducido por NATALIA FABENI