El sistema paywall de Folha multiplica su audiencia

21/06/2013 - 12h14

El paywall, sistema que limita el número de artículos que los usuarios pueden leer cada mes antes de solicitarles que se suscriban al diario, acaba de cumplir un año en Folha.

En este periodo, el número de visitantes de la web creció un 4%, el de páginas vistas subió un 15% y el suscriptor totalmente digital aumentó un 189%.

Folha fue el primer periódico brasileño en adoptar ese sistema. Desde entonces, más y más diarios encuentran en el paywall poroso una manera de financiar el periodismo de calidad sin impedir la lectura al internauta ocasional.

"Nuestra experiencia con el paywall muestra que ese es un modelo interesante y sostenible", afirma el director superintendente de Folha, Antonio Manuel Teixeira Mendes. Para Sérgio Dávila, editor ejecutivo del diario, "el internauta muestra estar dispuesto a pagar por el acceso a información confiable y de calidad".

Entre los diarios nacionales que tomaron ese camino están "Zero Hora", de Rio Grande do Sul, y la "Gazeta do Povo", de Paraná. Otros, como "O Estado de S. Paulo" y "O Globo", pasaron a exigir un registro a sus lectores tras un determinado número de clicks.

En el exterior, el caso de referencia para ese modelo es el periódico americano "The New York Times", que pasó a utilizarlo en 2011.

Según el instituto de encuestas Pew, al final del año pasado un tercio de los periódicos americanos ya había adoptado algún formato de paywall.

Con el modelo escogido por Folha, el internauta puede leer hasta 20 textos gratis por mes, aunque tras el décimo clik se le invita a rellenar un simple registro. Algunas partes de la web como la portada no entran en esa cuenta.

A partir del paywall, el periódico amplió la oferta de contenido en su dirección de internet. Textos antes exclusivos de la versión impresa pasaron a editarse en la web, lo que contribuyó al aumento de la audiencia.

La suscripción digital da acceso al contenido completo de Folha no solo desde su ordenador, sino también desde tabletas y celulares, para los que el periódico tiene una aplicación específica en tecnología HTML5, adaptable a diferentes modelos.

Traducido por MARÍA MARTÍN

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