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Inspirada en Obama, la recaudación de fondos por Internet es un fracaso entre las candidatas a la presidencia

19/09/2014 - 14h28

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RANIER BRAGON
ANDRÉIA SADI
DE BRASILIA

Así como hace cuatro años, las donaciones de personas físicas vía Internet para los principales candidatos a la presidencia de Brasil tienden a no tener mucho éxito.

Hasta ahora, Marina Silva (PSB) y Dilma Rousseff (PT) consiguieron recaudar por este medio cerca de 180.596 dólares, menos del 0,3% de todo lo que las dos campañas declararon haber recibido de donaciones hasta el final de agosto. Aécio Neves (PSDB) no adhirió al modelo.

Como tradicionalmente ocurre, las empresas privadas responden por el grosso de los recursos dados a las campañas. Otra fuente importante es el dinero público que proviene del Fondo Partidario.

La defensa del financiamiento electoral popular vía Internet se puso de moda después de que Barack Obama ganó las elecciones en Estados Unidos, en 2008, arropado por una ola popular que le rindió más de 3 millones de pequeñas donaciones vía Internet -la campaña anunció haber captado 500 millones de dólares-.

Además, la discusión ganó más importancia después de que el Tribunal Supremo Federal indicó que vetaría el financiamiento privado de las elecciones en Brasil.

La mayoría de los ministros de la Corte se posicionó en ese sentido en abril, pero el proceso fue interrumpido y todavía no hay fecha para su conclusión.

Los responsables por la recaudación de las campañas de Marina y Dilma no quisieron manifestarse.

En los bastidores, aliados de las dos candidatas dijeron que el modelo funciona en Brasil, actualmente, todavía de forma simbólica y que será necesario encontrar formas de incentivarlo, después de que entre en vigor la esperada veda del financiamiento privado de las elecciones.

No obstante, admtieron que aún no tienen idea de cómo hacer eso.

En las elecciones de 2010, Dilma y Marina estrenaron el uso de la herramienta en la disputa presidencial brasileña, con gran expectativa.

Al final, los electores que usaron tarjetas de crédito y débito para financiar las dos campañas desembolsaron 81.268 dólares para Dilma y 77.204 dólares para Marina, un 0,17% del gasto efectivo declarado por las campañas, en esa época.

En la actual disputa, la campana de la ex ministra de Medio Ambiente dice haber recaudado, hasta el viernes pasado (12), 101.585 dólares. Su sitio web afirma esperar que "en lugar de pocos contribuyendo con mucho", la campaña quiere ver a "muchos haciendo pequeñas contribuciones".

A pesar de eso, el PSB dijo que va a estar feliz si las donaciones alcanzan 451.490 dólares (un millón de reales), menos del 1% del techo de gastos declarado por Marina, que es de 67,7 millones de dólares.

Por su parte, la campaña de Dilma dice haber reunido 80.816 dólares hasta el martes (16) en donaciones de personas físicas vía Internet -0,1% de lo que la presidenta declaró haber recaudado hasta el final de agosto-.

Traducido por NATALIA FABENI

Lea el artículo original

Editoria de arte/Folhapress

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