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Sin citar a Neves, Rousseff pide por la unión del país y promete hacer una reforma política
27/10/2014 - 13h51
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MARIANA HAUBERT
DE BRASILIA
Después de lograr la reelección con el 51,6% de los votos válidos, la presidenta Dilma Rousseff ofreció un discurso para la militancia del PT en un hotel en Brasilia, en la noche del domingo (26). En su alocución, Dilma defendió la reforma política por medio de un plebiscito.
"Vamos a encontrar la fuerza y la legitimidad exigida en este momento de transformación para llevar adelante la reforma política. Quiero discutir eso con el Congreso Nacional y con toda la sociedad brasileña", dijo Dilma, aunque no mencionó a su adversario Aécio Neves en el discurso.
Dilma también se comprometió a castigar los casos de corrupción. "Tendré un compromiso riguroso en el combate a la corrupción y con la propuesta de cambios en la legislación actual para terminar con la impunidad, que es la protectora de la corrupción", dijo durante su discurso, en Brasilia.
"A lo largo de la campaña, anuncié medidas que serán importantes para que la sociedad y el país enfrenten la corrupción y terminen con la impunidad", indicó.
ECONOMÍA
En el área económica, Dilma afirmó querer combatir el aumento de la inflación. "Seguiré combatiendo la inflación con rigor y avanzando en el terreno de la responsabilidad fiscal. Incluso antes del inicio de mi próximo gobierno, llevará adelante esta tarea", dijo.
Durante su discurso, Dilma afirmó que quiere ser "una presidenta mucho mejor de lo que fue hasta ahora". "Quiero ser una persona mejor y me esforzaré por serlo, ese sentimiento de superación debe no solo impulsar el gobierno sino a toda la nación", apuntó la presidenta.
Al comienzo de su discurso, Dilma agradeció el apoyo de Lula da Silva, que fue saludado por la militancia al grito de "Lula, te amamos".
En todos los momentos en que fue citado, Lula fue más aplaudido que Dilma. Con la militancia muy exaltada, la presidenta pidió silencio a los presentes. "Estoy sin voz, tengo solo un poquito. Les pido que me ayuden, que hagan un esfuerzo por mí", dijo. Al final, los partidarios del PT entornaron el himno nacional.
DIÁLOGO
En su discurso, Dilma reconoció que necesita dialogar más con los diversos sectores de la sociedad. "Convoco, sin excepción, a todos los brasileños y brasileñas a que nos unamos a favor de nuestra patria, de nuestro país, de nuestro pueblo. No creo, sinceramente, que estas elecciones hayan partido el país al medio", expresó.
Para la petista, la "energía movilizadora" de las elecciones necesita ser convertida en un "entendimiento común" para hacer avanzar al país. "Algunas veces en nuestra historia, los resultados ajustados produjeron cambios más grandes y rápidos", dijo.
La defensa del diálogo y de la unión entre los brasileños es un intento de minimizar las consecuencias del duro embate entre Dilma y su adversario, el senador Aécio Neves (PSDB) en la segunda vuelta de las elecciones, marcada por las acusaciones cruzadas de corrupción y la falta de preparación para gestionar el país.
Muy criticada en su gobierno por no dialogar con sectores esenciales, incluso con los movimientos sociales, Dilma enfatizó que está abierta al diálogo. "Estoy dispuesta a abrir un gran espacio de diálogo con todos los sectores de la sociedad para encontrar una solución más rápida a nuestros problemas", indicó.
Dilma ofreció su discurso al lado del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, del vicepresidente, Michel Temer, y de los presidentes de los partidos de su alianza: Rui Falcão (PT), Carlos Lupi (PDT), José Renato Rabelo (PC do B), Ciro Nogueira (PP), Vitor Paulo (PRB), Antônio Carlos Rodrigues (PR), Kassab (PSD), Eurípedes Júnior (Pros).
Traducido por NATALIA FABENI