Rousseff defiende el ajuste fiscal y dice que las medidas no alteran su promesa de campaña

28/01/2015 - 14h23

Después de haber pasado casi un mes en silencio, desde que tomó posesión de su segundo mandato, la presidenta Dilma Rousseff defendió este martes (27), durante la primera reunión de los ministros de su nuevo gobierno, las medidas de ajuste para volver a equilibrar las cuentas públicas en 2015.

Criticada incluso por los integrantes del PT por haber aplicado un plan parecido al que defendía la oposición durante la campaña electoral, Rousseff dijo que las acciones tienen un "carácter correctivo" y que son "indispensables" para restablecer la salud financiera del país.

"Los ajustes que estamos haciendo son necesarios para mantener el rumbo, para ampliar las oportunidades, preservando las prioridades sociales y económicas (...)", dijo Rousseff frente a sus 39 ministros y al vicepresidente Michel Temer, en la Granja do Torto, residencia de campo oficial de la Presidencia.

La presidenta intentó justificar durante su discurso que el cambio en la política económica ya había sido señalado durante la campaña.

"La población brasileña votó por cambios y nosotros no podemos olvidarnos de eso", indicó. "Mostraremos que no alteramos ni un solo milímetro nuestro proyecto ganador de las elecciones", completó.

Dilma defendió la política económica adoptada en su primer mandato y dijo que el gobierno "cumplió su papel" al absorber los impactos generados por la crisis mundial, preservando el empleo y el ingreso de los trabajadores. Pero reconoció que esa política llegó al límite.

"Estamos frente a la necesidad de promover un nuevo equilibrio fiscal para recuperar el crecimiento de la economía lo más rápido posible, creando condiciones para la caída de la inflación y de la tasa de interés de medio plazo", explicó.

De acuerdo con lo que Folha averiguó, el ministro de Hacienda, Joaquim Levy, dijo durante la reunión que el equipo económico tendrá la función principal de garantizar la meta fiscal de este año, que dará las condiciones para que vuelvan las inversiones al país.

El presidente del Banco Central (BC), Alexandre Tombini, afirmó que una política fiscal rigurosa facilitará el trabajo del BC para llevar la inflación a la meta (4,5%) hasta fines de 2016.

MÁS PROBLEMAS

Dilma citó la escasez de agua como uno de los problemas que el gobierno deberá enfrentar y pidió la colaboración de los ministros para ayudar a los gobiernos estaduales y municipales a enfrentar este problema, principalmente en el Sudeste.

Además, indicó que el gobierno está tomando medidas para garantizar el abastecimiento de energía en el país.

Rousseff aprovechó la reunión para defender los cambios anunciados en el pago de los beneficios para los trabajadores y negó que las medidas representen una reducción de esos beneficios.

"Los derechos de los trabajadores son intocables y no será nuestro gobierno, un gobierno de trabajadores, el que vaya a revocarlos", indicó.

Traducido por NATALIA FABENI

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