Rousseff hizo un "pacto con el diablo" para salvar su gobierno, afirma el ex presidente Cardoso

25/09/2015 - 15h03

El ex presidente Fernando Henrique Cardoso (PSDB) piensa que la presidenta Dilma Rousseff hizo un "pacto con el diablo" para tratar de salvar su gobierno, al ofrecerle nuevas posiciones en diferentes ministerios al Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), su mayor aliado.

"¿Cómo va a hacer para gobernar? No va a poder. La van a gobernar", dijo el líder del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB).

En su opinión, la crisis sólo podrá ser superada si las fuerzas políticas logran encontrar la manera de contener la expansión del gasto público y reformar el sistema político.

*

Folha- La cúpula del PMDB se distancia de la presidenta y los diputados negocian posiciones en ministerios. ¿Qué significa eso?
Fernando Henrique Cardoso- En tiempos de incertidumbre, es natural que los partidos se mantengan oscilantes. El PMDB muestra dos direcciones. Algunos piensan que vale la pena mantener este gobierno y hay quienes sospechan que no da para más. Esto continuará durante mucho tiempo, hasta que haya más claridad acerca del paso siguiente que se debería tomar, ya sea desde el gobierno o desde los que quieren cambiarlo.

¿La oposición tiene los votos necesarios para abrir un juicio político?
El juicio político depende de un argumento convincente, no sólo para el Congreso, sino para la gente. Aquellos que desean el juicio político todavía no han construido una narrativa convincente.

¿Incluso si la presidenta sigue con tan baja popularidad?
¿Cuál es el resentimiento que la gente tiene con la presidenta? El hecho de haber dicho una cosa [durante la campaña] y haber hecho otra [en su administración]. Lo que la salva en algunos sectores de la población -el ajuste económico- es lo que la condena en otros.
El problema es la angustia del tiempo. Hay tantos errores que surgió una gran preocupación. Si fuera por un año, habría una expectativa de un cambio que estaría más cerca. Pero como no existe esa expectativa, la preocupación genera estas ideas para encontrar la manera de deshacerse de la presidenta.

El otro día usted defendió la creación de un nuevo "bloque de poder" como una solución ante la crisis política. ¿Qué es lo que falta?
La presidente tendría una salida histórica. Presentándose como coordinadora de un verdadero pacto. No pensando en ventajas para su grupo político, sino en el futuro del país, y proponiendo que el conjunto de las fuerzas políticas se una para hacer algunas cosas. Modificar el sistema electoral. Contener la expansión del gasto público. Reforma la seguridad social. Y ofrecería lo siguiente: aprobado el pacto, renunciaría en un año. Esto es utópico, lo sé.

¿Una renuncia negociada?
Negociada en nombre de objetivos políticos, que no son del interés de mi partido, o de ningún otro. El tiempo de Rousseff se está acabando. Ella tiene que mirar la historia. No conviene quedar como la presidenta que no logró gobernar. O que vendió su alma al diablo para gobernar. Ahora, le ofreció cinco ministerios al PMDB. ¿Podrá gobernar? ¿Cómo? No podrá hacerlo. La van a gobernar.

En el caso de renuncia, asume el vicepresidente Michel Temer...
La asunción el vicepresidente no resolvería el problema. Es necesario hacer una nueva configuración, pero no tiene sentido mantener una nueva configuración con reglas antiguas. Rousseff puede seguir gobernando. Va a tener que hacer un pacto con el diablo todo el tiempo. Va a tener que ceder cada vez más. Y el gobierno va a volverse más contradictorio.

¿Cómo han sido las conversaciones del PSDB con Michel Temer?
El PMDB es el único que puede dar las cartas en el juego hoy en día. Rousseff puede optar por una posición cómoda o hacer un gesto de grandeza. Lo más probable es elija el lugar cómodo. El PMDB puede construir una salida constitucional.
El PSDB se enfrentará a otra cuestión. ¿Va a ayudar o no? De haber una razón concreta, una narrativa convincente, votará por el juicio político. ¿Y después? Los problemas no van a cambiar porque el presidente cambió. Es necesario que hay un sentido, un rumbo. Ahí el PSDB tendrá que demandar esa dirección.

Traducido por NATALIA FABENI

Lea el artículo original

	Ernesto Rodrigues/Folhapress
	El ex presidente de Brasil Fernando Henrique Cardoso, durante una entrevista con Folha