PUBLICIDAD

Siga-Nos

Las últimas galerías de fotos

Marcas de tensión Marcas de tensión

Publicado en 11/04/2016

Mercado Brasileño

17h36

Bovespa

-0,07% 124.646

16h43

Oro

0,00% 117

17h00

Dólar

+0,29% 5,1640

16h30

Euro

+0,49% 2,65250

PUBLICIDAD

La fiebre del oro moviliza a miles de personas hacia una reserva ambiental en Amazonas

28/11/2016 - 21h02

Publicidad

FABIANO MAISONNAVE
ENVIADO ESPECIA A NOVO ARIPUANÃ (AM)

Poco adepto a la vida urbana, el agricultor Arildo Ari Mar, de 72 años, nunca quiso seguir a sus hermanos y cambiar la comunidad de Santa Rosa por Manaos, a unos 500 kilómetros de viaje en barco.

Hace un mes, sin embargo, vio surgir una ciudad de buscadores de oro sobre el trecho del río Madeira, frente a su casa.

"Estos barcos aparecieron de la nada. Ni siquiera sabíamos que había oro aquí. Sé que hicieron pruebas, se quedaron y comenzó a llegar gente de Humaitá, Porto Velho", comenta este ex extractor de caucho.

En la jerga del Amazonas, este fenómeno es conocido como chisme. Un buscador de oro se encuentra gran cantidad de este metal precioso, la noticia se expande y enseguida aparece una multitud que llega en busca de la misma suerte.

Esta vez, la fiebre del oro se produjo en un tramo del río Madeira, frente a la comunidad donde viven 16 familias. El área forma parte de la Reserva de Desarrollo Sostenible (RDS) Río Madeira, de 283.000 hectáreas.

Al comienzo, durante las primeras semanas de este mes, había alrededor de 700 balsas que buscaban oro, de acuerdo con la administración de la RDS.

Esto significa una población flotante de 3000 personas. Todas operando de forma ilegal. Pero no había oro para todo el mundo, y la empresa comenzó a "fracasar".

Cuando Folha estuvo en la región, a mediados de mes, alrededor de la mitad de los barcos ya había abandonado la zona.

Por otro lado, había cuatro dragas grandes recién llegadas operando, con capacidad de procesamiento equivalente al de varias barcazas.

Los trastornos de la invasión para los residentes fueron inmediatos. Por la contaminación causada, tuvieron que comprar galones de agua en Novo Aripuana, la ciudad más cercana, a unos 40 km.

Desde el barco escolar, los niños, la mayoría de ellos evangélicos, llegaron a ver mujeres desnudas encima de un prostíbulo flotante, estacionado a pocos metros de las casas.

Las plantaciones de banana, principal fuente de ingresos, se transformaron en baño para los buscadores de oro. La pesca fue interrumpida.

Hasta ahora, las acciones de fiscalización fueron puntuales y de poco efecto.

Consultado por Folha, el secretario de Medio Ambiente del estado, Antonio Stroski, dijo que las grandes acciones de comando y control en la Amazonía son lentas debido a las distancias y el costo, pero que está siendo planificada una operación con el gobierno federal.

Traducido por NATALIA FABENI

Lea el artículo original

Gracias!

Close

¿Está interesado en las noticias de Brasil?

Suscríbase a nuestra newsletter en español, enviada los días hábiles, y manténgase informado sobre las noticias de Brasil.

Cancelar