Una manifestación contra el presidente Temer en la Explanada de los Ministerios termina en disturbios

25/05/2017 - 13h57

La protesta organizada por centrales sindicales y movimientos de izquierda contra el presidente Michel Temer transformó el miércoles (24) la "Explanada de los Ministerios", en Brasilia, en el escenario de una auténtica batalla campal entre la Policía Militar y la Fuerza Nacional, y los manifestantes.

Los manifestantes atacaron siete ministerios llegando a incendiar uno de ellos. Al menos 49 personas llegaron a ser atendidas de urgencia, entre ellas un hombre herido de bala.

El acto congregó a 35 mil personas, de acuerdo con la Policía Militar, y 150 mil, según organizadores de la protesta.

Por decreto, Temer convocó a las Fuerzas Armadas para proteger el patrimonio federal. Y la noche del miércoles, la seguridad de los ministerios ya estaba reforzada por el Ejército. Una decisión que suscitó fuertes críticas tanto por parte de la oposición como por parte de diputados afines al Ejecutivo.

"El acto iba a ser pacífico, pero degeneró en violencia, vandalismo y falta de respeto, agresiones al patrimonio público y amenazas a personas, muchas de ellas funcionarios que se encuentran aterrorizados (...) las tropas están llegando para asegurar que los edificios de los ministerios se mantengan intactos; es inaceptable el caos y el descontrol", dijo el ministro de Defensa, Raúl Jungmann.

Jungman atribuyó el despliegue de tropas militares al presidente de la Cámara, Rodrigo Maia (DEM). Por su parte, el diputado lo negó y dijo que lo que pidió era el empleo de la Fuerza Nacional, información que fue confirmada posteriormente por el Gobierno.

Aunque en un primer momento las Fuerzas Armadas tomarían Brasilia durante una semana, la mañana del jueves (25), el propio ministro de Defensa anunció en rueda de prensa la revocación del decreto de intervención de las Fuerzas Armadas.

Los enfrentamientos callejeros se vieron reflejados en el Congreso. Los parlamentarios de la oposición criticaron el uso de militares, mientras los gobernantes hicieron críticas a la manifestación.

Antes, Michel Temer había pedido a sus aliados que mantuvieran "un ambiente de normalidad".

Traducido por AZAHARA MARTÍN

Lea el artículo original