Las últimas galerías de fotos
Mercado Brasileño
17h38 Bovespa |
+1,50% | 126.526 |
16h43 Oro |
0,00% | 117 |
17h00 Dólar |
-0,93% | 5,1156 |
16h30 Euro |
+0,49% | 2,65250 |
PUBLICIDAD
Con algunos problemas, ArtRio refleja la crisis del mercado de arte en Brasil
28/09/2016 - 16h23
Publicidad
SILAS MARTÍ
ENVIADO ESPECIAL A RÍO
Las nubes negras en el horizonte no mienten. El furioso movimiento de operarios, artistas y dueños de galerías a la vera de la bahía de Guanabara tampoco deja dudas de que ArtRio arranca con atrasos en su preparación y la difícil misión de tratar de parar la sangría que sufre el mercado del arte, que parece agonizar.
"Cuando comenzamos, fue la época en la que el Cristo estaba despegando en la tapa de la revista 'The Economist'. Era un momento económico muy bueno", dijo Brenda Valansi, directora de la feria.
"Ahora estamos sintiendo una caída en las ventas. No voy a salir por el mundo llamando a las galerías extranjeras diciendo que todo va a ser increíble".
Definitivamente no va a ser así. En su sexta edición, ArtRio abre sus puertas con un número menor de galerías y ocupa un espacio más discreto, lo que refleja el momento más agudo de la crisis por la que está pasando el mercado de arte de Brasil.
Todos los gigantes de la escena global, como las galerías americanas Gagosian y Pace, la suiza Hauser & Wirthe y la británica White Cube, abandonaron el barco. Solamente David Zwirner, una de las casas más influyentes del mundo, quedó como sobreviviente en esta playa desierta en la que se transformó el escenario carioca para los extranjeros.
Otros factores, como los Juegos Olímpicos, también complicaron el panorama. Entre otras cosas, por causa del evento deportivo, ArtRio se despegó del calendario de la Bienal de São Paulo, que comenzó a principios de este mes.
Traducido por NATALIA FABENI