Las últimas galerías de fotos
Mercado Brasileño
17h33 Bovespa |
-0,33% | 125.148 |
16h43 Oro |
0,00% | 117 |
17h00 Dólar |
-0,77% | 5,1290 |
16h30 Euro |
+0,49% | 2,65250 |
PUBLICIDAD
Ópera prima de Brasilia, el Palacio de Itamaraty cumple 50 años
15/03/2017 - 12h04
Publicidad
RAUL JUSTE LORES
ENVIADO ESPECIAL A BRASILIA
La reina Elizabeth, la primera ministra de India, Indira Gandhi, y el príncipe (futuro emperador de Japón) Akihito ya eran recibidos en el nuevo palacio y de Itamarty en medio de un Eje Monumental de Brasilia todavía semidesierto.
Protocolo y seguridad no faltaron desde la apertura de la nueva sede de la diplomacia brasileña, hace 50 años. La construcción inaugurada el 14 de marzo de 1967 desafía todos los clichés de la arquitectura de Oscar Niemeyer y las obras públicas en Brasil.
Es funcional, majestuoso y en su día evitó desperdicios o reformas por falta de planificación.
Allí, el maestro carioca encontró un exótico cliente público exigente, que sabía lo que quería y que controlaba todo lo que era edificado.
Inicialmente, sería una simple caja de vidrio, como los Palacios de la Alvorada (residencia oficial del presidente de la República) y el Planalto (edificio que alberga los despachos de la Presidencia).
El diplomático Wladimir Murtinho jefe de la Comisión de Transferencia del Ministerio de la Relaciones Exteriores para Brasilia, exigía una construcción más segura.
Y fue así que nació el Jardín Acuático de Burle Marx, que protege el edificio de la misma forma que se protegían los castillos en la época medieval.
¿Cómo lidiar con la pesadilla del protocolo de las recepciones, cuando una comitiva enorme se pierde en las colas de los ascensores y alguna autoridad es dejada atrás?
Ya en la cuarta reunión de la Comisión de Trabajo, en septiembre de 1959, se pide una escalinata monumental. Es un caracol que fluctúa, con anchos peldaños, desde la planta diáfana lleva al tercer piso, con largos descansillos entre uno y otro, ya que muchos dignatarios no son exactamente jóvenes vivarachos.
Con 72.000 m² de área construida, el Itamaraty es el mayor que los palacios de Planalto, Alvorada, Jaburu y del Supremo Tribunal Federal juntos.
"Con diversas funciones ceremoniales de Estado, toma de posesión de presidentes y recepciones de jefes de estado que visitan el país, nació como palacio, más funcional que megalomaniaco", cuenta el consejero Heitor Granafei, organizador de las conmemoraciones del 50 aniversario.
Para celebrar el aniversario del edificio, el Ministerio anunció la restauración de un mural de Volpi y una iniciativa con estudiantes de restauración de muebles para recuperar el mobiliario original.
Traducido por AZAHARA MARTÍN