Tahití es aquí

15/04/2014 - 14h16

El tercer gol de São Raimundo, marcado a los 47 minutos del segundo tiempo, fue celebrado en silencio por el lateral Maranhão, de 32 años.

El jugador optó por no correr detrás de Railson, autor del gol. Exhausto, se tiró sobre el césped de Ribeirão, el único estadio en el estado de Roraima, en donde se juegan partidos del campeonato estatal.

Un minuto más tarde, a las 20.20 del sábado, terminaría un día muy agitado.

Maranhão se despertó a las 4 de la mañana para trabajar cerca de nueve horas en un horno de cerámica en Boa Vista antes de ir a la concentración del segundo líder del torneo.

"Yo juego porque amo este deporte. Sé que no me voy a hacer rico. El fútbol aquí es sólo para los que sienten pasión", dijo el lateral al abandonar el campo cojeando, con dolor en la pierna derecha, y saludado por algunos hinchas, casi todos parientes y amigos del jugador.

Con un salario de 270 dólares al mes en São Raimundo, Maranhão es uno de los veteranos del campeonato patrocinado por Zeca Xaud, de 69 años, el presidente más antiguo de la federación del país.

El contador controla la Federación Roraimense de Fútbol hace 39 años. Xaud colecciona 11 mandatos ininterrumpidos y recibe cerca de 316.000 dólares por año de la CBF para administrar el fútbol local.

El año pasado, la CBF oficialmente transfirió 12 millones de dólares para las federaciones.

A pesar de administrar un fútbol casi amateur, el dirigente estará mañana en la sede de la CBF junto a los líderes de los mejores clubes del país para votar por Marco Polo Del Nero. Su voto tiene el mismo peso de Corinthians o Flamengo.

Sólo los 20 clubes de primera división y los 27 presidentes de las federaciones participan de la votación. Los atletas y los árbitros no tienen derecho a votar.

Este año, Xaud organiza un campeonato que incluye seis clubes, con jugadores que necesitan cumplir un doble turno para vivir. El torneo finaliza el próximo mes. A partir de ahí, los clubes entran en receso hasta enero de 2015.

"Estoy aquí hasta hoy en el cargo porque soy honesto y amigo de todos. Transformo lo que es poco en mucho. Por eso ellos siempre me eligen", explica Xaud, acerca de su larga permanencia en el cargo.

El sábado, no estaba presente en el lugar donde se jugaron dos partidos del campeonato local. Ya había embarcado hacia Río. En esa ocasión, el equipo Río Negro venció al Náutico por 2 a 0. En el partido siguiente, con una iluminación que parecía de discoteca, el São Raimundo le ganó al Atlético-RR por 3 a 1.

Los partidos se jugaron con las puertas abiertas y no lograron atraer a más de 400 espectadores. El interés es tan pequeño que no hay ninguna radio que transmita los partidos.

Dentro del campo de juego, no había médicos. Sólo una vieja ambulancia estacionada en el borde del campo. El vestuario muy caluroso, sin sillas, sólo sirve para que los jugadores se pongan su uniforme.

La cerveza, que está prohibida en los estadios del resto del país, es de venta libre en el Ribeirão.

GITANOS DE LA PELOTA

"El fútbol no es lo más organizado, pero tengo fe que voy a crecer aquí", dijo el volante Diogo Santana, de 25 años. Él dejó el Mato Grosso hace cerca de un mes para defender el Atlético-RR.

En asociación con un empresario minero, el club cuenta con jugadores "gitanos" (que ya jugaron en otros estados y países) en su mayoría.

Desde el mes pasado, cerca de 20 jugadores comparten una casa húmeda en Pintolândia, uno de los barrios más violentos de la ciudad.

"Si la concentración gana partidos, vamos a ser campeones", bromeó el bahiano Igor B Love, de 26 años, que comparte con decenas de compañeros un baño y una heladera, cerrada con candado por los dirigentes. El salario promedio allí es de cerca de 316 dólares, pero el primer pago ya está atrasado siete días.

Con una plantilla de salarios de aproximadamente 11.228 dólares, igual que sus rivales, el Atlético-RR es el mayor ganador del campeonato (20 en total).

A pesar de la tradición, el equipo abrió la competencia de este año con nueve jugadores en el campo. El arquero suplente fue elegido para el ataque, debido a la dificultad en la contratación.

AMATEURISMO

Xaud es considerado por los aficionados y directivos como el principal responsable de es amateurismo. Aun así, los dirigentes prefieren no entrar en confrontación pública con el presidente. Ellos temen sufrir persecución en los partidos.

"Tenemos diferencias, pero también nos ayuda", dijo el presidente de São Raimundo, el policía Sergio Caranguejo, de 52 años, que al final de este año se recibirá de teólogo.

Hace una semana, tuvo que pedirle "1128 dólares" a Xaud después de que su equipo "entró en default" en Georgetown, Guyana. La junta directiva no recibió los 10.000 dólares prometidos luego de enfrentar al Slingerz.

Presidente del Náutico, el campeón actual, el gaúcho Adroir Bassorici, de 40 años, ya no tiene más esperanzas de que haya algún cambio y dijo que va a abandonar el deporte, en caso de que no ganen el bicampeonato.

Debido a la victoria del año pasado, el club jugó la Copa de Brasil (fue eliminado por los suplentes del Ponte Preta por 4 a 1) y recibió de los organizadores del torneo unos 68.000 dólares por su participación.

"Aquí no hay dinero. En la Copa de las Confederaciones, todo el mundo se sorprendió por el amateurismo de Tahití. Realmente, Tahití no está tan lejos. Es aquí", dijo Bassorici, en la tribuna vacía, mientras que su equipo perdió en el castigado césped del estadio Ribeirão.

Traducido por NATALIA FABENI

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