Pasadas las Olimpiadas de Rio, Brasil sufre desbandada de entrenadores extranjeros

03/01/2017 - 15h58

El fin del ciclo olímpico provoca una desbandada de técnicos extranjeros contratados para preparar a los deportistas brasileños.

De los 56 entrenadores que participaron en 26 modalidades y tenían relación con el COB (Comité Olímpico Brasileño) o confederaciones deportivas, se estima que apenas un tercio continuará en el país de cara a Tokio 2020.

El Comité todavía está en negociaciones con algunos de los entrenadores y espera tener un panorama más claro en el primer trimestre de 2017. La mayoría o fueron despedidos o se marcharon por voluntad propia.

Las razones de estos últimos, muchos de ellos contratados por una elevada cuantía, varían: malos resultados en los Juegos, problemas de adaptación o el impacto de la crisis financiera en las inversiones destinadas al deporte.

La lista de los que han decidido marcharse incluye al danés Morten Soubak (con quien la selección femenina de balonmano obtuvo sus principales conquistas, el título mundial de 2013 y la sexta posición en Londres 2012), al argentino Rubén Magnano (del equipo masculino de baloncesto), al croata Ratko Rudic (de la selección masculina de polo acuático) y al ruso Alexander Alexandrov (de la gimnasia artística).

Por otro lado, el COB ha conseguido que algunos de los extranjeros que obtuvieron resultados memorables permanezcan en Brasil hasta la próxima disputa olímpica.

Es el caso del español Jesús Morian, de 54 años, que llevó a Isais Queiroz al podio hasta en tres ocasiones.

El ucraniano Vitaly Petrov también continuará al mando del equipo de Thiago Braz en salto de pértiga así como la japonesa Yuko Fujii lo hará en judo femenino, tras el oro de Rafaela Silva y el bronce de Mayra Aguiar.

Traducido por AZAHARA MARTIN

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