El Comité Olímpico Brasileño busca patrocinadores privados

16/02/2017 - 11h29

Seis meses después de Río-2016 y sin la renovación de contratos con patrocinadores privados, el Comité Olímpico Brasileño ya no recibe las cuotas de Nike, Nissan y Bradesco.

Todo los contratos de patrocinio expiraron el 31 de diciembre de 2016. En aquel momento el Comité Olímpico Brasileño estaba en el mercado diseñando un nuevo plan comercial con empresas interesadas en apoyar el deporte olímpico, hasta los Juegos de Tokio, que se celebrarán en 2020.

De acuerdo con el Comité, las primeras categorías que estarán abiertas para la nueva tanda de negociaciones serán las de material deportivo, banca y telefonía.

Sin el apoyo de las empresas, actualmente, el Comité Olímpico Brasileño cuenta con la Ley Piva como principal fuente de recursos. El texto obliga a destinar un porcentaje de la recaudación de la lotería de la Caja Económica Federal al Deporte Olímpico y Paralímpico del país.

La Organización espera recaudar cerca de R$ 210 millones (US$ 69 millones) en 2017 con recursos de la lotería.

Nike tenía relación con el Comité Olímpico Brasileño desde 2012, así como Nissan. Ya la relación con Bradesco se remonta a 2010 cuando el banco ganó el primer concurso como patrocinador nacional de los Juegos Olímpicos.

El Comité Olímpico asegura que los contratos con los antiguos patrocinadores no fueron renovados porque eran acuerdos específicos para el período olímpico en el que el país era organizador de los Juegos.

El Comité, que es presidido por Carlos Arthur Nuzman desde 1995, representa a Brasil ante el Comité Olímpico internacional y tiene autonomía determinada por la Constitución.

Traducido por AZAHARA MARTÍN

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