Para el 73% de los habitantes de São Paulo, las protestas generan más daños que beneficios

22/05/2014 - 14h17

Con la huelga de conductores y cobradores de autobuses en São Paulo, el humor de los que viven en São Paulo, en relación con las protestas en general, parece haber entrado en una rápida mutación.

De cada 10 residentes de la ciudad, 7 afirman que las protestas generan más daños que beneficios. Sea para sí mismos (69%) o para el conjunto de la sociedad (73%).

Los números son altos. En las encuestas anteriores, nunca habían predominado este tipo de evaluaciones críticas.

Sin embargo, todavía hay una estrecha mayoría, un 52%, que apoya las manifestaciones.

Los datos provienen de la encuesta de Datafolha realizada en la ciudad de anteayer, en el primer día de la huelga de autobuses que interrumpió todo el sistema de transporte en el municipio.

Por la naturaleza de la muestra, estos resultados son comparables con los de dos encuestas de 2013. Una hecha en junio, poco después de la explosión de la enorme ola de manifestaciones en todo el país, y la otra en septiembre.

En las dos ocasiones anteriores, el apoyo de los paulistanos a las protestas era mucho más grande. En junio, el 89% las aprobaba. En septiembre, un 74%.
Hay, sin embargo, diferencias esenciales entre las protestas de junio de 2013 y las que comenzaron el pasado martes (20).

El año pasado, miles de personas de diferentes orígenes fueron a las calles para reclamar por diversas cuestiones: la reducción de las tarifas del transporte, el fin de la violencia policial, mejoras en la educación y la salud y la lucha contra la corrupción, entre otros.

Los actos de 2013 comenzaron bajo la coordinación del Movimiento Passe Livre, pero poco a poco, mientras iban creciendo, el liderazgo se fue diluyendo. La ciudad se detenía debido a las enormes manifestaciones.

Ahora, la protesta fue hecha por un grupo en particular: los empleados de las empresas de autobuses urbanos. El interés declarado: frustración con un aumento de 10% del salario, eso sólo se refiere a la categoría. Y el liderazgo del movimiento, al menos hasta ahora, es clandestino, ya que la dirección del sindicato de la clase no está relacionada con la huelga.

Otra diferencia: lo que hace que la ciudad quede parada no es la gente en la calle, sino los autobuses estacionados para bloquear las vías de acceso.

MUNDIAL

Datafolha también investigó temas relacionados con la organización del Mundial en Brasil este año.

El dato que más llama la atención es el alto porcentaje de paulistanos que creen que hay corrupción en la organización del evento, un 90%.

Los residentes de São Paulo están divididos acerca de la conveniencia de realizar el Mundial en Brasil: 45% está a favor y 43% está en contra. Como el margen de error es de cuatro puntos (fueron entrevistadas 819 personas), se trata de un empate técnico.

Pero la condición del país como sede del evento es menos controvertida. Para el 76%, Brasil no está preparado para acoger el Mundial. Y para el 66%, el torneo traerá más daño que beneficios al país.

Cuando la pregunta es acerca de la posibilidad de protestas durante el Mundial, muchos cambian de lado. En ese caso, el 63% afirman estar en contra de las manifestaciones.

¿Eso significa un alivio para las autoridades asustadas con esta hipótesis? No tanto. Para el 76%, las protestas en contra el Mundial se van a incrementar hasta que empiece el torneo.

Traducido por NATALIA FABENI

Lea el artículo original