Según economistas, la reforma de las Pensiones se deja para 2018 y la bajada de tipos de interés desacelera

26/05/2017 - 14h52

La euforia que embargaba a economistas y analistas se transformó en cautela. Cada vez más cristalizada la percepción de que ni el presidente Michel Temer ni un posible sustituto están en condiciones de poner en marcha con desenvoltura la reforma de las Pensiones, su aprobación se deja para 2018.

Con el cambio de expectativas, las nuevas previsiones apuntan que Brasil tardará más en reducir el crecimiento de la deuda pública, lo que impedirá una caída más acelerada de los tipos de interés y por tanto la economía crecerá menos, según explican especialistas.

La mayoría de los economistas no se aventura a dar a conocer sus proyecciones sobre la correción del PIB hasta no ver los números del primer trimestre, que salen el jueves (1).

"El banco Fator espera un alza del 1% del PIB en 2017, pero eso debe ser corregido y llegar a cero", pronostica el economista jefe de la entidad, José Francisco de Lima Gonçalves.

De lima Goçalves está seguro de que la reforma de la Pensiones se retrasará, pero terminará saliendo el año que viene.

Cristiano Oliveira, economista jefe del Banco Fibra, se adelantó y el lunes ya corrigió la previsión al alza del PIB en 2017 y vaticinó una corrección del 1% al 0,5% (y del 3,5% a 2,5% % el próximo año).

Los fundamentos de la economía no cambiaron, pero el hecho de que la reforma de la Seguridad Social sólo salga en el primer trimestre de 2018 debe hacer que la Selic caiga más lentamente, lo que hará que el tipo de interés cobrado al consumidor final también tarde más en ceder.

El PIB esperado por Tendencias del 0,3% en 2017 debe pasar por algún ajuste, dice el economista Silvio Campos Neto.

Los grandes bancos aún no se manifestaron. El Santander, sin embargo, da algunas pistas sobre cuáles pueden ser sus próximos pasos, al admitir que tal vez el sesgo del PIB sea a la baja.

De momento, el equipo económico del banco no ha alterado las previsiones para los principales indicadores y uno de los motivos es ya estar en el extremo más conservador de las estimaciones.

Traducido por AZAHARA MARTÍN

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