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Dilma se plantea cancelar su viaje a los EEUU
02/09/2013 - 16h47
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VALDO CRUZ
DE BRASÍLIA
ANDRÉIA SADI
DEL PAINEL, EN BRASILIA
Indignada, Dilma Rousseff se plantea cancelar el viaje oficial a los Estados Unidos, programado para octubre, en el caso de que el presidente Barack Obama no dé "respuestas satisfactorias" sobre los actos de espionaje de la NSA (Agencia de Seguridad Nacional) que afectarían a la presidenta brasileña.
Rousseff no solo está "indignada", sino también "muy irritada", según asesores del área diplomática, porque se siente "engañada" por el gobierno norteamericano.
A fin de cuentas, cuando surgieron las primeras noticias sobre el espionaje de la agencia americana en Brasil, los Estados Unidos garantizaron que la actividad de la NSA estaba restringida a operaciones de "metadatos", con cruces de informaciones que sería inclusive de interés para el gobierno brasileño.
Aún no hay una decisión final sobre la posibilidad de cancelar el viaje de Estado y el Palacio de Planalto espera que el presidente Obama se explique de forma cabal y tome las medidas necesarias para suavizar el "gran malestar" generado por las informaciones que apuntan a que la presidenta Rousseff fue objetivo directo de la red de espionaje, según desveló el programa "Fantástico" el domingo.
En el gobierno, los asesores comentan que sin una respuesta de Obama, Rousseff no tiene cómo viajar a los Estados Unidos y posar para la foto al lado del americano. Según ellos, sería lo mismo que decir a todo el mundo, que a Brasil no le importa que le espíen.
En el gobierno brasileño, la información de que Rousseff fue objeto de espionaje se considera el "episodio más grave" desde el comienzo de las filtraciones de documentos secretos relacionadas con las actividades de la NSA.
El Palacio de Planalto espera no verse obligado a cancelar el viaje, previsto para el día 23 de octubre, ya que representaría una crisis diplomática. La expectativa es que la presión brasileña sobre Obama dé resultado.
Traducido por MARÍA MARTÍN