A través de Internet, un grupo de jóvenes reúne a interesados en hacer donaciones para los sin techo

03/07/2015 - 14h52

Personas sin techo que duermen en las calles de São Paulo fueron sorprendidas en la madrugada del último miércoles (1º) con una acción solidaria sin precedentes: recibieron bufandas hechas por niños que representan lo opuesto a su realidad, se trata de estudiantes del colegio Porto Seguro, uno de los más exclusivos del país.

Además de la vestimenta contra el frío, también recibieron cupcakes, mantas y un kit con un cepillo de dientes, dentífrico, preservativo, jabón, medias, agua mineral, un paquete de galletas y un sándwich.

La movilización fue realizada por el grupo "Entrega por São Paulo", que usa las redes sociales para reclutar voluntarios y donaciones.

Hace cerca de un año, los involucrados en el proyecto eran ocho amigos. De la última acción, participaron 200 personas, que consiguieron recaudar material suficiente para 650 kits.

"No estamos ligados a ninguna religión, a ningún partido o empresa. Eso ayuda a motivar a las personas a creer más en la idea, a juntarse", dice Lucas Caldeira Brant de Tolentino (31), líder de la acción.

La única exigencia para participar de las entregas, que tienen lugar una vez por mes, es ser mayor de 18 años.

Los voluntarios -la mayor parte jóvenes de clase media- se reparten en seis frentes de distribución y cubren áreas como el Minhocão, una autopista del centro de la ciudad, en donde muchos sin techo duermen debajo de su estructura; y la Ceagesp, un centro de distribución de alimentos.

"Tenemos una postura de respeto por las personas en situación de calle. Aquellas que quieren conversar, hablar de la vida, además de recibir el kit, les damos toda la atención posible. Las que no quieren, les dejamos las donaciones y nos vamos", afirma Marcela Branco (26) que se encarga de la coordinación del grupo.

La bióloga Amanda Francisco (21) participó por primera vez. Conoció el movimiento a través de Facebook y decidió unirse, junto a tres amigas de edades similares.

Cledson Danilo (32), que desde hace cuatro meses vive en las calles del barrio Santa Cecilia (en la región central de la ciudad), fue uno de los varios que recibieron las bufandas de regalo. "Es maravilloso", opinó sobre la iniciativa.

Traducido por NATALIA FABENI

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