Por amor, dinero y poder, las mujeres recurren al tráfico y llenan cárceles

La ruptura de familias es una de las peores consecuencias de un camino que suele comenzar con la búsqueda del dinero, poder y amor

Rio de Janeiro

Fabiana Escobar subió a Rocinha para hablar con Bem-Te-Vi, el jefe de la favela, y cobrar el dinero para los gastos de su esposo en la cárcel. Ya cerca de su destino, se desvió y, minutos después, unos tiros a un transformador dejaron a oscuras la favela y Bem-Te-Vi estaba muerto.

Fabiana pasó cerca del destino de muchas mujeres metidas en el narcotráfico que, encarceladas o muertas, ya no pueden criar a sus hijos.

La ruptura de familias es una de las peores consecuencias de un camino que suele comenzar con la búsqueda del dinero, poder y amor. Otro resultado es el hacinamiento de las cárceles femeninas, cuya población, en su mayoría negra, se ha multiplicado por seis en los últimos 20 años. Más de la mitad están detenidos por tráfico de drogas o delitos relacionados.

SÃO PAULO,SP,22.07.2021: La detención de Lorraine Cutier Bauer Romeiro, de 19 años. (Foto: Alexandre Serpa/Futura Press/Folhapress)

Cuando su esposo fue arrestado, Fabiana se convirtió en Bibi Perigosa y asumió un puesto de mando en la favela más grande de Brasil.

Ya la jefa del tráfico en la región metropolitana de Río Rayane Nazareth da Silveira, Hello Kitty, de 21 años, fue asesinada en junio en una operación de la Policía Militar. En julio, la Policía Civil de São Paulo arrestó a Lorraine Cutier Bauer Romeiro, de 19 años, Gatinha da Cracolândia.

Al contrario que ellos, la mayoría de las mujeres que incurren en este tipo de delitos “ocupa posiciones subordinadas y absolutamente sustituibles”, dice la abogada penalista Maíra Fernandes.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

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