Una de cada tres universidades brasileñas no cumple los requisitos legales exigidos para ser considerada "universidad".
De acuerdo con la Constitución, universidades, ya sean públicas o privadas, deben actuar en enseñanza, extensión e investigación - lo que depende de profesores con dedicación integral y de programas sólidos de postgrado.
La LDB, Ley de Directrices y Bases, de 1996, define que un tercio de los profesores de las universidades deben tener dedicación integral.
Este tipo de institución necesita aún dos programas de doctorado y cuatro de maestría, exigencia establecida en resolución del Consejo Nacional de Educación, en 2010.
Un estudio inédito de Folha con base en el Censo de Educación Superior de 2016 y en la plataforma Sucupira da Capes (Federal Federal ligada al Ministerio de Educación) de 2018 muestra que 68 de las 196 universidades del país (34,7%) no cumplen al menos una exigencia oficial para operar como tal.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA
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