El sector del lodo frena medidas para mejorar la seguridad en las represas

Diputados recibieron donaciones de empresas pero niegan defender al gremio

Brasília y São Paulo

​Una pequeña tropa de diputados que salieron elegidos en legislaturas pasadas gracias a las donaciones de empresas mineras, a día de hoy, trabaja a destajo desde la grada para mantener los intereses del sector: se dedica a proponer cambios en los textos que han tenido como resultado la retirada de la fiscalización, ocupa cargos clave en comisiones y trata de influenciar a congresistas.

El principal representante del recién apodado ‘sector del lodo’, debido al rompimiento de la represa de la compañía Vale en Brumadinho, Leonardo Quintão (MDB-MG), recibió en 2014 R$ 2,1 millones (US$ 560 mil) de empresas mineras (un 42% de lo que recaudó).

En 2018, no consiguió conservar el escaño, pero mantuvo su influencia, convirtiéndose en asesor del gobierno Jair Bolsonaro (PSL).

Nueve diputados activos en materia de minas mantuvieron su lugar en la Cámara, como los mineros Paulo Abi-Ackel y Domingos Sávio (PSDB), los paraenses José Priante (MDB) y Joaquim Passarinho (PSD), y los capixabas Evair Vieira de Melo (PP) y Sergio Vidigal (PDT).

En 2017, al aprobar la medida provisional (MP) que fundó la Agencia Nacional de Minería (ANM), la Cámara echó abajo una tasa de fiscalización que servía para viabilizar auditorías presenciales que velasen por la seguridad de las minas y represas.

El texto aprobado fue redactado por el autor de la MP, Quintão -que argumentó que la creación de una tasa federal podría inviabilizar la estatal ya existente.

En 2014, cuando una comisión especial fue creada para discutir cambios en el Código de Minería, el asunto se convirtió en protagonista en la Cámara. Aquel año, de los 52 miembros de la comisión, 23 habían salido elegidos gracias a la financiación de empresas mineras. Fueron los últimos comicios con donaciones de empresas.

Tras la tragedia de Mariana (MG) en 2015, el proyecto de la comisión no prosperó y la relación de los diputados quedó en entredicho.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

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