Vale había previsto la inundación del comedor y de la sede de la represa pero hizo caso omiso al peligro

En aquellos lugares se han encontrado muchas de las víctimas mortales; La empresa dice que era una situación hipotética

Rio de Janeiro y São Paulo

El dique se vino abajo llevándose por delante las casas colindantes - AFP

Antes de la tragedia de Brumadinho (MG), Vale ya sabía que una posible rotura del dique de la represa destruiría las áreas industriales de la mina de Córrego de Feijão, en las que se localizaban el restaurante y la sede de la unidad, justo donde se hallaron gran parte de los cuerpos de las víctimas y donde se encontraban muchos de los desaparecidos en el momento del colapso.

La información consta en el plan de emergencia de la represa, del 18 de abril de 2018.

La compañía minera se negó a enviar el documento que posteriormente fue obtenido por Folha junto a uno de los órganos oficiales encargados de recibirlo.

El colapso de la estructura el pasado viernes (25) destruyó incluso las sirenas que debían avisar a los empleados de la compañía. Además acabó con la vida de los responsables de mandar el alerta en caso de emergencias.

Hasta el jueves (31), las autoridades habían contabilizado 110 muertos y 238 desaparecidos. Muchos de ellos estaban en el restaurante de la mina, a 1 km de la presa. La rotura tuvo lugar a la hora del almuerzo. Otros estaban en la posada Nova Estancia, cuya inundación también estaba prevista en el plano de emergencia.

Para expertos, debido a la proximidad, los empleados de la Vale tendrían poca oportunidad de escapar aunque la alarma hubiera funcionado.

El documento, que prevé los daños en caso de colapso, es el Plan de Acción de Emergencia (PAEBM). El mapa de la inundación figura en el anexo A.

Según la orden del Gobierno Federal, el plan debe calcular los daños en caso de rotura y definir medidas para la mitigación del desastre. En el caso de Brumadinho, Vale había previsto que la riada de lodo llegase a 65 km de la represa.

"El territorio para la propagación de la onda de rotura, corriente abajo, está compuesto por diversos usos y coberturas. Parte de la vegetación existente en el área es clasificada como de gran porte, como áreas de bosques y reforestación, además de áreas de pasturas, observándose la presencia de áreas antropizadas en las manchas urbanas”.

El plan prevé que "diferentes mecanismos de comunicación sean utilizados, con el uso de accionamientos sonoros". Ninguna sirena, sin embargo, tocó, como admitió el jueves el propio presidente de Vale, Fabio Schvartsman.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

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