Portando armas de alto calibre, un grupo de aproximadamente 15 hombres invadió la Tierra Indígena Waiãpi en el oeste de Amapá, arrebató una aldea y se ha dedicado a hacer incursiones para intimidar a los indios que viven en una región remota del Estado, de acuerdo con un documento interno de la Funai. (Fundación Nacional del Indio).
Según las declaraciones de los Waiãpis, la Funai asegura que este grupo de individuos fue quien perpetró el asesinato del líder Emyra Waiãpi la semana pasada (no hubo testigos y el cadáver fue encontrado al día siguiente).
El órgano señala que aún no ha llegado a la escena del crimen, a la que se llega recorriendo un a parte del trayecto en coche, después en bote y por último a pie.
La invasión se produce en medio de repetidas declaraciones del presidente Jair Bolsonaro (PSL) de que pretende legalizar la minería y la explotación en tierras indígenas, una de sus promesas de campaña. No obstante, el cambio en la legislación tiene que contar con la aprobación del Congreso.
El documento de la Funai indica que los invasores están pernoctando en la aldea de Aramirã, lo que obligó a los waiãpis a concentrarse en la comunidad vecina, Marity, a 40 minutos andando.
Funai ordenó a los indios que no se acercaran a los hombres armados, posiblemente mineros ilegales. Y es que la región es rica en oro.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA