Tras el éxito de los bikinis de cinta adhesiva, llegan a Río los bañadores masculinos

De la mano de Danny Bronze, el periodista prueba el diseño que promete el contorno perfecto

Rio de Janeiro

La moda de los bikinis con cinta adhesiva ha alcanzado un nuevo nivel este verano en Río, con la llegada de una multitud de colores fluorescentes para reemplazar al negro que reinó las temporadas pasadas. Las cintas, las mismas que usan los electricistas, ahora son vendidas en rosa chicle, naranja, verde y morado. Además de las azules y rojas más tradicionales que no brillan en la oscuridad como las fluorescentes.

Pero las novedades no acaban por aquí. Los puestos de diseño de bikinis y bañadores con cinta adhesiva instalados en una pisicna municipal de Río, comenzaron a ofrecer bañadores masculinos. Todavía su aceptación no ha pegado: “Hago una masculina a la semana. Ya bikinis femeninos, hago unos 40 al día”, dice Rayane Teixeira, socia de Daniele Dantas en el puesto Danny Bronze, que lleva trabajando en el local desde hace cinco años.

Aplicación de bronceador en una cliente con bikini de cinta adhesiva (Foto: Raul Spinassé/Folhapress, COTIDIANO) - Folhapress

Los bikinis de cinta adhesiva comenzaron a aparecer en 2013, en una azotea localizada en  el barrio de Realengo, también en la zona norte de la capital fluminenese. Allí, Erika Bronze era famosa por diseñar bikinis sobre mujeres locales que no tenían acceso a las playas cercanas. Poco después, se popularizó y la clase media también comenzó a demandar estos servicios. En 2017, Anitta terminó de hacer famoso el invento mostrando el bikini de cinta adhesiva en su clip "Vai, Malandra".

Pero la moda aún no ha llegado a las playas del sur, como Copacabana e Ipanema, o al oeste, como Barra da Tijuca. Para aprovechar esta invención, se debe viajar al Río más profundo.

El objetivo, es la búsqueda de la marca perfecta de bronceado, prácticamente como si se dibujara con una regla. Además, la mayoría va más allá y se arriesga usando como bronceador un producto hidratante llamado crema de parafina. "Para volver a casa con la marca del bikini, las mujeres negras tienen que estar una hora boca arriba y otra de espaldas. Las más blancas solo veinte minutos o media hora", explica Danny Bronze.

No es necesario recordar, pero es más que necesario decir que ningún dermatólogo recomienda el uso de cinta aislante en el cuerpo, ya que puede causar alergia o incluso derretirse bajo el sol intenso, abriendo llagas al ser despegada. Asimismo, los fabricantes de crema de parafina desaconsejan la exposición prolongada al sol.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

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