En su tercera declaración de radio y televisión sobre la crisis del nuevo coronavirus, el presidente Jair Bolsonaro criticó el martes el cierre de escuelas y comercios como medida para combatir la epidemia, asimismo atacó a gobernadores y culpó a la prensa por lo que considera una histeria colectiva.
El mandatario dijo que desde el comienzo de la crisis, el Gobierno ha estado preocupado por contener el "pánico y la histeria" y nuevamente minimizó la gravedad de Covid-19 comparándolo con un "resfriado" o una simple "gripe".
Los parlamentarios reaccionaron con perplejidad al pronunciamiento de Bolsonaro, que en los últimos día parecía que había cambiado el tono ante la crisis. El presidente del Senado, Davi Alcolumbre (DEM-AP), dijo que "el país necesita un liderazgo serio, responsable y comprometido con vida y salud de su población".
En su discurso, Bolsonaro dijo que "una gran parte de los medios de comunicación fueron a contracorriente" del gobierno y "e hicieron cundir el pánico, apelando a la gran cantidad de víctimas en Italia".
Bolsonaro argumentó que el país europeo tiene características diferentes a las de Brasil, y que el panorama fue "exagerado por los medios de comunicación para que la histeria se extendiera".
El presidente también dijo que "nuestras vidas deben continuar" y los puestos de trabajo "deben mantenerse". "El sustento de las familias debe ser preservado. Tenemos que volver a la normalidad", dijo.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA