El gobierno del presidente Jair Bolsonaro desvió el propósito de los R$ 7,5 millones (US$ 1,3 millones) donados específicamente para la compra de pruebas rápidas de Covid-19 y transfirió los fondos al programa Patria Voluntaria, liderado por la primera dama, Michelle.
El 23 de marzo, Marfrig, uno de los mayores mataderos de carne vacuno del país, anunció que donaría esta cantidad al Ministerio de Sanidad para la compra de 100.000 pruebas rápidas de detección del nuevo coronavirus.
En aquel momento, Brasil enfrentaba las primeras semanas de la pandemia y la falta de este material, mientras, la OMS (Organización Mundial de la Salud) recomedaba encarecidamente la realización de pruebas masivas a la población.
Dos meses después, el 20 de mayo, según la empresa ha informado por escrito a Folha, la Casa Civil de la Presidencia de la República informó que el dinero se utilizaría "para el propósito específico de compra y aplicación de pruebas de Covid-19".
Sin embargo, el 1 de julio, con el dinero ya transferido, el gobierno de Bolsonaro consultó a Marfrig sobre la posibilidad de no usar el dinero para pruebas, sino para otras acciones para combatir la pandemia. Los recursos terminaron en el proyecto Recaudación Solidaria, asociado al Pátria, de Michelle Bolsonaro.
Creado por decreto del presidente Jair Bolsonaro (sin partido) en julio de 2019, Pátria Voluntária es un programa coordinado por la Casa Civil y tiene como objetivo incentivar la práctica del voluntariado y estimular el crecimiento del tercer sector, recaudando dinero de instituciones privadas y transfiriendo a organizaciones sociales.
Los recursos de donaciones transferidos a las ONG provienen del proyecto Recaudación Solidaria, asociado al Patria. El programa ya ha consumido aproximadamente R$ 9 millones de las arcas públicas en publicidad pagada por la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA