El Tribunal Federal de Cuentas (TCU) determinó que los fiscales que trabajaron en la Lava Jato deben devolver las dietas que recibieron mientras trabajaban en la Operación que investigó los desvíos en la Petrobras.
El magistrado Bruno Dantas, relator de la contabilidad especial, concluyó que hubo daño al fisco y violación del principio de impersonalidad, con la adopción de un modelo "beneficioso y rentable" para los integrantes del grupo de la Operación.
El Tribunal llegó a esta conclusión debido al modelo adoptado por los trabajadores, en el que los fiscales no fueron trasladados a Curitiba, por lo que recibieron dietas y gastaron billetes de avión cada vez que iban a la capital paranaense.
Aceptando los argumentos, el magistrado Bruno Dantas afirmó que el modelo operativo del grupo, con el constante desplazamiento de fiscales a Curitiba, "no representó el menor costo posible para la sociedad brasileña, sino todo lo contrario. Garantizaba a los fiscales participantes la recepción de grandes sumas en concepto de dietas, sin el menor análisis de alternativas más interesantes desde la perspectiva del Estado".
Cinco fiscales fueron convocados para devolver el dinero: Antonio Carlos Welter, Carlos Fernando dos Santos Lima, Diogo Castor de Mattos, Januário Paludo y Orlando Martello Junior.
Deltan Dallagnol, quien coordinó el grupo de fiscales en Curitiba, será convocado para devolver conjuntamente recursos a las arcas públicas por haber idealizado supuestamente el modelo de trabajo de la operación.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA