En el primer debate presidencial transmitido por TV, el presidente Jair Bolsonaro (PL) se convirtió en el blanco preferido de los demás candidatos. El actual jefe ejecutivo, por su parte, apuntó al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (PT), quien esquivó la pregunta sobre corrupción.
El tema central del debate fue el respeto a la mujer, un terreno en el que Bolsonaro opera en desventaja. El asunto fue planteado por las candidatas Simone Tebet (MDB) y Soraya Thronicke (União Brasil), pero dominó las discusiones tras un ataque del presidente a la periodista Vera Magalhães.
Además de Simone y Soraya, Ciro Gomes (PDT) y Lula se solidarizaron con Vera. El debate también contó con la participación de Felipe D'Ávila (Novo).
El evento fue organizado de forma conjunta por Folha, UOL y TVs Bandeirantes e Cultura, y duró casi tres horas. Lula y Bolsonaro fueron los últimos en confirmar su presencia, tras días de incertidumbre en las campañas.
Según la última encuesta de Datafolha, publicada este mes, Lula lidera con el 47% de las intenciones de voto, frente al 32% de Bolsonaro y el 7% de Ciro.
Además de los duelos entre Lula y Bolsonaro, hubo un encontronazo entre Ciro y el PT. Tebet fue una de las principales críticas del presidente durante el debate, pero tampoco perdonó a Lula. El jefe del Ejecutivo mantuvo la calma en los enfrentamientos con los opositores, pero se descontroló cuando Vera le preguntó sobre la vacunación.
"Vera, no podía esperar otra cosa de ti. Creo que duermes pensando en mí, tienes algo de pasión por mí. No puedes tomar partido en un debate como este. Acusarme con mentiras. Eres una vergüenza para el periodismo brasileño", le reprochó Bolsonaro.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA