Una exposición en São Paulo muestra las reliquias del Ilê Aiyê, la primera banda de carnaval afro de Brasil y símbolo contra el racismo

Fue creado para que los negros se divirtieran pues no podían salir en grupos como los blancos

Maria Luísa Barsanelli
São Paulo

La Madre Hilda expresaba su preocupación en una época en la que se endureció todavía más el régimen militar. Y no era para menos. El primer grupo afrobrasileño, el Ilê Aiyê tanteaba un nuevo terreno mientras sufría la represión de la policía y la preocupación de la sociedad baiana, que lo tachaba de racista por aceptar exclusivamente a personas negras en su cortejo.

El Miércoles de Ceniza de 1975, tras el desfile inaugural de carnaval del Ilê, bajo el título "Grupo racista, nota desentonada", el diario baiano A Tarde publicó un artículo en el que calificaba la participación del grupo de "feo espectáculo" con “enorme falta de imaginación".

Como crítica a las motivaciones del grupo, concluía: "No tenemos felizmente problema racial, esta es una de las grandes felicidades del pueblo brasileño".

Ilê Ayê fue el primer grupo afrobrasileño de Carnaval y fue acusado de racismo por admitir solo a negros
Ilê Ayê fue el primer grupo afrobrasileño de Carnaval y fue acusado de racismo por admitir solo a negros - Richner Allan/Divulgação

"El Ilê fue llamado de racista, pero en realidad fue creado para que los negros se divirtieran porque no podían salir en grupos como los blancos", explica Vinícius Murilo, uno de los comisarios de la exposición sobre el Ilê, que Itaú Cultural alberga a partir del miércoles (3).

El hijo de Madre Hilda, Antonio Carlos dos Santos, de 66 años, más conocido como Vovô [Abuelo], debido a un traje de chaqueta demasiado grande que vistió en la infancia, recuerda que la idea de fundar el grupo surgió de conversaciones en el barrio del Curuzu.

"Veíamos que, en las bandas famosas, los negro sólo podían participar vistiendo disfraz", dice Vovô, que actualmente es presidente de Ilê. En la época, cuando contaba con 20 años, simpatizaba con el movimiento black power americano y sugirió que el grupo se llamara Poder Negro.

Pero escuchó decir a las voces temerosas, como la de su madre, que el nombre podría ser visto con malos ojos. "Mucha gente creía que la creación de aquel grupo negro era el principio de una revuelta", cuenta Simoni Barbiellini, otra comisaria de la muestra paulistana.

El apodo en yoruba fue escogido a partir de la sugerencia de un amigo, que llevaba un diccionario de lengua africana. Llegaron a "ilê "(casa) y a "aiyê " ( mundo terrenal), y acabaron traduciendo el nombre del grupo como "casa de todos".

La sede del Ilê fue durante muchos años el centro de candomblé de la Madre Hilda, lugar en el que se congregaba la comunidad del Curuzu. "Todo sucedía allí, fiesta de San Juan, fiesta de fin de año, etc.", cuenta Vovô.

Pero la matriarca, que participó en los festejos hasta cerca de su muerte, en 2009, se encargaba de separar las actividades de la banda de su candomblé. La religión se restringe a los cultos, aunque haya en el Ilê un homenaje a la simbología africana.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

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