'Os Sertões', de Euclides da Cunha, incluye el pasaje "el sertanejo es, sobre todo, un fuerte". Poco después, hay otra frase, casi nunca recordada. "No tiene el raquitismo de los mestizos neurasténicos de la costa".
Autor del trabajo canónico de la literatura brasileña, el genio Euclides fue un hombre racista, como puede verse en varios pasajes del libro. Y no es de ahora que el adjetivo acompaña al escritor, periodista e ingeniero de Río de Janeiro.
En "La tierra, el hombre, la lucha", un texto que se publicó por primera vez en 2002 y acaba de ganar una nueva edición gracias a Tres Estrellas, el sello editorial del Grupo Folha, el profesor y ensayista Roberto Ventura escribió que Euclides seguía "las teorías racistas y evolutivas de su época".
Tenga en cuenta que el libro de Ventura no arremete contra la obra, por el contrario, es una guía que invita con entusiasmo a la lectura de 'Os Sertões', publicada en 1902.
En homenaje a Euclides, la 17ª edición del Festival Literario Internacional de Paraty, Flip, llama la atención sobre el autor responsable de un "estilo sonoro" y capaz, como pocos, de interpretar "las dos caras contradictorias y complementarias del país", como dijo Roberto Ventura.
Pero es inevitable, por otra parte, que el evento arroje luz sobre el hombre influenciado por las teorías deterministas, hoy en día consideradas obsoletas.
Como la mayoría de los intelectuales brasileños, desde el siglo XIX hasta el XX, Euclides leyó los estudios del biólogo alemán Ernst Haeckel. Como recuerda la antropóloga Lilia Schwarcz, autora de 'El Espectáculo de las Razas', Haeckel escribió que la civilización no podría prosperar en un territorio como el brasileño.
La lectura de este naturalista alemán es fundamental para guiar a Euclides por el determinismo geográfico. Sin la influencia de Haeckel, de hecho, 'La Tierra', la primera parte de 'Os Sertões', no sería lo mismo.
El escritor brasileño también abordó las teorías del sociólogo austriaco Ludwig Gumplowicz y del naturalista francés Hippolyte Adolphe Taine. Viene de los conceptos formulados por estos dos y otros de la misma convicción de Euclides sobre el daño del mestizaje.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA