El futuro incierto del desfile del Carnaval de Río debido a la falta de recursos municipales

El alcalde de Río decidió eliminar los fondos para las escuelas de samba para la temporada 2020

Rio de Janeiro

"El Carnaval es un bebé rechoncho que tiene que ser destetado y caminar con sus propias piernas", dice siempre que tiene oportunidad el alcalde de Río de Janeiro, Marcelo Crivella (PRB). Pues dicho y hecho. Hace apenas unos meses decidió unilaterlamente destetarlo.

De esta forma, el Consistorio determinó el fin de recursos destinados a las escuelas de samba que desfilarán en el sambódromo Marquês de Sapucaí a partir del próximo año, después de haber reducido las subvenciones a una cuarta parte lo asignado por su predecesor, Eduardo Paes (DEM).

Carnaval Río 2018 - Gabriel Nascimento | Riotur

Sin dinero municipal a la vista, las ligas de escuelas de samba están pasando por un período de incertidumbre y pensando una forma de financiar el desfile. Todavía no se ha concretado, por ejemplo, quién pagará los servicios de limpieza, seguridad, iluminación y atención médica en el sambódromo.

Al igual que con los subsidios otorgados a las asociaciones de las escuelas, era el Ayuntamiento el que financiaba esta parte del evento. Sin embargo, en julio, Crivella decidió prohibir a los órganos  públicos invertir o proporcionar servicios gratuitos a eventos de venta de entradas. Para el alcalde, quienes tendrían que asumir estos gastos serían los propios organizadores, como ya sucede en el festival de música  Rock in Rio.

"Estamos cambiando la inversión pública por la privada. La ciudad es la única que invierte recursos oficialmente en el Carnaval, mientras que la recaudación fiscal se comparten con los gobiernos estatal y federal", explica Marcelo Alves, presidente de Rio-tur, la empresa municipal responsable de la organización del evento.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

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