Bolsonaro favorece a empresas con las subvenciones a la energía solar

Bancos, cadenas minoristas y la agroindustria son los más beneficiados

Rio de Janeiro

La consevación del marco regulador del sector de la energía solar, promovido por el propio presidente Jair Bolsonaro, favorece especialmente a grandes empresas como bancos, compañías telefónicas, cadenas minoristas y empresas agroindustriales.

Para expertos del sector, el Gobierno adoptó una postura populista al ecurrir al discurso de "no cobrar por el sol" cuando el debate no planteaba la creación de tributos sino la eliminación de una subvención que eleva la factura de electricidad de todos los consumidores del país.

Paneles solares en la Amazonia.‚Samara Souza/WWF-Brasil - Samara Sousa
 

Según cálculos del Ministerio de Economía, la subvención costará a los consumidores R$ 34 mil millones (US$ 8 mil millones) hasta 2035. Aún así, el martes (7), Bolsonaro se reunió con Aneel (Agencia Nacional de Energía Eléctrica) y dijo que el debate se había acabado. Y la subvención se mantiene.

La propuesta de Aneel, apoyada por los Ministerios de Minas y Energía y Economía, era crear un calendario y una programación para poner fin a la exención, adoptada en 2012, por el uso de la red de transmisión.

La medida buscaba incentivar la expansión de la generación distribuida de la energía solar, también llamada GD.

“Se está incurriendo en un terrible error en esta discusión. Nadie quiere cobrar por el sol. Esto ha sido una jugada inteligente del personal de la energía fotovoltaica", dice el consultor Adriano Pires del CBIE (Centro Brasileño de Infraestructura).

El modelo actual exime a las casas y compañías que actúan como generadores de GD del pago de cargos y por el uso de la red de distribución y transmisión.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

Lea el artículo original