Debido a una fuerte caída de las exportaciones, la balanza comercial brasileña cerró el año pasado con un superávit de 46.700 millones de dólares. Y es el peor resultado desde 2015, cuando el saldo fue de US$ 19.500 millones.
En comparación con 2018, cuando se registró un superávit de US$ 58 mil millones, el resultado del comercio internacional brasileño ha disminuido casi un 20%.
La caída se explica principalmente por el resultado de las exportaciones, que bajaron un 7,5% llegando a US$ 224 mil millones.
Las importaciones también disminuyeron, pero en menor medida. La reducción fue de un 3.3%, llegando a US$ 177.300 millones.
En 2019, las ventas al exterior por parte de Brasil disminuyeron más en comparación con los productos manufacturados (-11.1%). Este resultado, que se consolida con el rendimiento del año pasado, fue impulsado por los embarques de plataformas petroleras, vehículos de carga y automóviles.
Las exportaciones de productos semimanufacturados y básicos se redujeron un 8% y un 2% respectivamente.
Los datos publicados por el Ministerio de Economía el jueves (2) también mostraron que el año pasado Brasil vendió menos a Mercosur, América Central y el Caribe, Unión Europea, África y Asia.
Las exportaciones que aumentaron fueron las destinadas a Oceanía, Medio Oriente y Estados Unidos.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA