Un proceso de adquisición de la empresa fue paralizado y la abogada que se hizo cargo del negocio tuvo que extender su tiempo fuera de casa. Fue así que perdió la fiesta de cumpleaños de su hijo. Cuando llegó a casa, el menor le dio la espalda y le disparó que ya no la reconocía como madre. La letrada renunció.
El testimonio fue escuchado en 2014 por la investigadora Patrícia Bertolin, cuando estaba preparando el libro “Mujeres en la Abogacía - Estándares masculinos de carrera o el techo de vidrio”, que trata sobre los obstáculos que dificultan que las mujeres lleguen a la cima de las firmas de abogados.
Entrevistó a 32 abogados y abogadas de 14 de los bufetes más grandes del país que trabajan en todas las áreas del derecho. Aquel año, las mujeres eran menos del 30% de los miembros de estos consejos, a pesar de ser la mitad de los empleados.
Para cambiar esta situación, abogadqs han abierto bufetes exclusivamente de mujeres o con gran mayoría de mujeres en la dirección, algunas como de "sociedad de abogadas".
Ya era hora de que los niños hicieran que Claudia Bernasconi cambiara una de los bufetes penales más importantes del país por una oficina dirigida por mujeres. En el bufete actual hay seis socios, uno de los cuales es un hombre. En total, trabajan 25 personas, 19 de estas son mujeres.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA