Este lunes (27) Petrobras convocó una rueda de prensa para contradecir al presidente Jair Bolsonaro y afirmar que no cambiará su política de precios de los combustibles, lo que conllevará nuevos aumentos en el precio que paga el consumidor para corregir la diferencia actual.
Según el presidente de la empresa estatal, Joaquim Silva e Luna, "no se producirán cambios en la política de precios".
"Seguimos trabajando de la misma forma que siempre trabajamos", dijo el general, y agregó que no hay control de precios, pese a que la empresa evita reflejar las turbulencias específicas del mercado a los consumidores.
No obstante, cinco horas antes, Bolsonaro dijo que estaba debatiendo formas de reducir los precios del combustible y advirtió que "nada es tan malo, que no puede empeorar".
El aumento ha ejercido presión sobre la inflación, y el deterioro de la economía se cita como una de las razones de la caída de la popularidad del presidente, que busca ser reelegido el próximo año. Los mercados reaccionaron bien a las declaraciones de Silva y Luna.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA