La economía brasileña se ha contraído un 0,1% en el tercer trimestre de 2021, en comparación con los tres meses inmediatamente anteriores, según los datos del PIB (Producto Interno Bruto) publicados este jueves (2) por el IBGE (Instituto Brasileño de Geografía y Estadística).
El número se situó ligeramente por debajo de las expectativas del mercado financiero. Los analistas consultados por la agencia Bloomberg proyectaron una variación nula (0%). Este es el segundo mínimo consecutivo del indicador, que confirma las señales de estancamiento de la actividad económica. En el segundo trimestre, la caída del PIB se revisó del 0,1% al 0,4%.
El IBGE y los economistas entrevistados por Folha afirman que dos caídas consecutivas no necesariamente constituyen una recesión, concepto que técnicamente depende del análisis de otros indicadores.
El débil desempeño se da en un contexto de escalada inflacionaria, mayores tipos de interés e inestabilidad en el mercado laboral, que dificultan la recuperación de la actividad económica. El PIB está un 0,1% por debajo del nivel registrado a fines de 2019, período prepandémico, y un 3,4% por debajo del punto más alto de la serie histórica, el primer trimestre de 2014.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA