El regreso de Brasil al Mapa del Hambre es un retroceso sin precedentes en el mundo, dice economista

Uno de los creadores de Fome Zero, Walter Belik, critica el desmantelamiento de la red de seguridad alimentaria por parte del gobierno de Bolsonaro

Uno de los creadores de Fome Zero y uno de los principales investigadores en seguridad alimentaria en Brasil, Walter Belik, profesor jubilado del Instituto de Economía de la Unicamp, sostiene que el gobierno de Bolsonaro está llevando a cabo una política deliberada de desmantelamiento de iniciativas contra el hambre en el país .

Belik recuerda la creación de Fome Zero como un proyecto multipartidista. Originalmente diseñado como un programa para distribuir cupones a cambio de alimentos, fue reemplazado por Bolsa Família, el buque insignia de la política social de Lula, y el nombre pasó a designar una estrategia de seguridad alimentaria.

Las iniciativas allanaron el camino para que Brasil saliera del Mapa del Hambre de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) en 2014. El escenario cambió a partir de 2015, dice Belik, con el aumento de la inflación, la ausencia de recomposición del valor de los beneficios sociales y una desmantelamiento de las políticas de seguridad alimentaria, especialmente bajo el gobierno de Bolsonaro.​

El país volvió al Mapa del Hambre en 2018 y, en 2020, registró el 55,2% de la población viviendo en inseguridad alimentaria, según una encuesta de la Red Penssan. Escenas observadas en 2021, como personas buscando huesos y restos de carne para alimentarse y las diversas protestas contra el hambre, no pueden atribuirse solo a la crisis provocada por la pandemia, explica.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

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