Petrobras confirmó una nueva renuncia de su presidente. Esta vez el derrocado fue José Mauro Coelho y la CVM (Comisión de Valores Mobiliarios) abrió un proceso administrativo para determinar si la estatal cumplió las reglas del mercado al divulgar su cambio de mando.
Coelho ya había sido despedido por Jair Bolsonaro, pero estaba a la espera de una junta de accionistas para confirmar su reemplazo. Sin embargo, este lunes (20), tras fuertes presiones del Gobierno y del sector de centro, decidió rendirse y dejar el cargo.
En su lugar, asume de forma interina el actual director de exploración y producción de la empresa, Fernando Borges, ya que el nombre señalado por el Ejecutivo, Caio Paes de Andrade, tiene que recibir la aprobación de los accionistas, en una reunión aún sin fecha definida.
La salida de Coelho redujo las posibilidades de que la Cámara acceda al pedido de Bolsonaro de instalar una Comisión de Investigación para investigar posibles abusos de la dirección de la empresa ante las alzas en los precios de los combustibles, que han enfurecido al mandatario.
Presidencia y el presidente de la Cámara, Arthur Lira, mantienen el plan de realizar proyectos de modificación de la fiscalidad o de las reglas de reajuste de la empresa, en un intento por contener el precio de los derivados del petróleo.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA