Al contrario de lo que los países europeos y algunos países sudamericanos han estado haciendo como medidas para contener el nuevo coronavirus en sus territorios, el gobierno brasileño dijo el lunes (16) que mantendrá sus fronteras abiertas.
"No estamos pensando en cerrar fronteras, por el contrario. Ahora vamos a resolver el problema del barco que está en Recife y tenemos dentro dos uruguayos y argentinos adentro, que son pasajeros, tripulación, y vamos a recibir a estos sudamericanos y vigilar su aislamiento en Recife antes". para poder enviarlos a los países de origen", dijo el secretario ejecutivo del Ministerio de Sanidad, João Gabbardo dos Reis, durante una entrevista de prensa este lunes por la tarde.
Durante la entrevista, el gobierno brasileño también hizo mención al aislamiento voluntario en el país, a diferencia de lo que las autoridades europeas han estado haciendo con el objetivo de tratar de contener la transmisión del nuevo coronavirus.
La medida se debe aplicar a los brasileños que vienen del extranjero, incluso sin síntomas. En este caso, la recomendación es que se queden en casa durante siete días y busquen atención médica si tienen fiebre y otros síntomas, como tos y falta de aire.
Para otras personas, la directriz es evitar las multitudes y adoptar medidas de distancia social. El aislamiento es obligatorio solo para personas con un diagnóstico confirmado y contactos cercanos, como miembros de la familia.
El lunes, el Ministerio de Sanidad actualizó el número de confirmaciones de personas diagnosticadas con el nuevo coronavirus a 234.
El Gobierno también aclaró que la recomendación del aislamiento voluntario no debe aplicarse a los extranjeros que vienen a Brasil para participar en reuniones o congresos. "No tiene sentido estar aislados en un hotel hasta que participan en la actividad", dijo Wanderson Oliveira, secretario de vigilancia de salud del Ministerio.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA