Así como en Bielorrusia, en Brasil las mujeres están liderando el movimiento de oposición al dictador Aleksandr Lukachenko.
Julia, de 38 años, que trabaja con proyectos internacionales (y decidió no dar su apellido), y la profesora Volha Yermalayeva Franco, de 31, iniciaron una campaña en línea la semana pasada para denunciar el fraude electoral y las medidas violentas por parte del gobierno contra las manifestaciones. También crearon una página de Facebook.
Ambas forman parte de la pequeña comunidad bielorrusa en Brasil, que cuenta con unas 120 personas, según el cónsul Grigori Goldchleger. La embajada dice que desconoce el tamaño de la colonia.
La campaña pide que se proyecten en el Cristo Redentor los colores de la bandera roja y blanca tradicional del país, utilizada antes de la era Lukachenko. Hasta el miércoles por la tarde (9), casi 1.500 personas habían firmado la petición.
Julia, residente de Recife, vive desde hace 13 años en Brasil, donde trabaja dando asistencia comercial a empresas.
“Cuando empezó este terror, pensamos: estamos en Brasil, ¿qué podemos hacer? Empezamos a buscar a otros miembros de la comunidad. Estamos muy impactados, queremos denunciar lo que sucede”, cuenta la activista, que conoció a Volha en Internet. Un grupo de WhatsApp con una decena de personas fue el inicio de la movilización.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA