"La guerra ha comenzado". Los brasileños que viven en Ucrania se despertaron la mañana de este jueves (24) con mensajes como este, ruidos de explosiones y sirenas de alarma de bombardeos.
Los ataques rusos pillaron por sorpresa a la gente, especialmente a los que vivían en Kiev y sus alrededores, a cientos de kilómetros de la frontera y las regiones separatistas de Donetsk y Lugansk.
Este es el caso de la publicista Cristiane Barros Nedashkovskaya, de 30 años, de Pará, que vive en Bila Tserkva, en la región metropolitana de Kiev, una de las ciudades afectadas por los ataques aéreos.
"Me desperté a las 5h con el sonido de la explosión, la sirena de alarma sonó debido a la conmoción. Luego escuché más explosiones, drones volando por encima. Fue un momento de desesperación, muy tenso".
Casada con un ucraniano y viviendo en el país desde hace un año y medio, Cristiane intentó repostar su coche para poder viajar a la frontera con Rumanía.
Pasó horas en la cola de la gasolinera. Las salidas de la ciudad están congestionadas de autos que intentan salir del lugar.
La guerra también está afectando a un grupo muy conocido en Ucrania: los futbolistas brasileños. Algunos deportistas se han refugiado en un hotel de Kiev con familiares.
El delantero del Shakhtar Donetsk, Junior Moraes, publicó el siguiente mensaje en Instagram: "Amigos, la situación es grave y estamos atrapados en Kiev esperando una solución para que nos saquen de aquí. ¡Recen por nosotros!".
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA