4 de cada 10 paulistanos sufrieron prejuicios o presenciaron algún tipo de discriminación contra LGBT

Espacios públicos y medios de transporte son los lugares más hostiles para LGBTs, según muestra un estudio

São Paulo

Cerca de 4 de cada 10 paulistanos ya sufrieron prejuicios o presenciaron algún tipo de discriminación contra la población LGBT en lugares públicos y en medios de transporte de la ciudad de São Paulo.

Es lo que se desprende de la encuesta "Vivir en São Paulo - Derechos LGBTQI +" realizada por la Ong Rede Nossa São Paulo en colaboración con el instituto Ibope.

La población LGBT (lesbianas, gays, bisexuales, travestis, transexuales y transgéneros) es más vulnerable en las calles, en las plazas, en los trenes y en los autobuses porque esos lugares propician "encuentros entre las diferencias", dice el sociólogo Américo Sampaio, coordinador de la Rede Nossa São Paulo.

Público en la presentación del tercer Foro de Turismo LGBT, en São Paulo - Divulgação

"Los números son graves: dos tercios de la población paulistana no saben convivir con lo diferente justamente en espacios que posibilitan este tipo de ejercicio", afirma.

Escuelas, colegios, centros comerciales, bares y restaurantes -todas con gran movimiento de personas-, también fueron recordados por los encuestados como puntos frecuentes de casos de discriminación.

Según el sondeo, mujeres negras o mestizas, de escolaridad mediana con ingresos mensuales de hasta dos salarios mínimos y residentes en la zona este, tienen la percepción de que son las más afectadas por estos prejuicio. Ya para el grupo de hombres blancos, la ciudad es más indiferente en lo que se refiere a los colectivos LGBT.

La zona este se destaca porque es la región más poblada de la ciudad y por eso cobra más relevancia en la muestra de encuestas realizadas para el estudios, explica Sampaio.

Para Thiago Amparo, profesor de políticas de diversidad de la Fundación Getúlio Vargas y columnista de Folha, los más afectados por los prejuicios ya viven al margen de la sociedad. "Son personas que residen en la periferia y se desplazan  grandes distancias para trabajar. Un LGBT en esas condiciones sufre aún más", comenta.

Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA

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