Sujeto oculto

11/11/2013 - 15h07

El titular del viernes pasado de Folha "Alcalde lo sabía todo, dice el fiscal preso en una grabación", inducía al lector al error. El alcalde de São Paulo es Fernando Haddad, pero la referencia era hacia su antecesor en el cargo, Gilberto Kassab.

El título se originó a partir de la transcripción de una llamada telefónica en la que el auditor Ronilson Bezerra Rodrigues decía que debían ser convocados a declarar "el secretario y el alcalde con quienes trabajé", porque "ellos tenían conocimiento de todo".

Ronilson fue subsecretario de la Receita Federal (organismo de recaudación impositiva) en el gobierno de Kassab y, en la gestión actual, fue director de São Paulo Transporte (SPTrans) de febrero a junio pasado.

El fiscal no cita por su nombre al ex alcalde, pero es fácil deducir de quién está hablando. Fue en la gestión anterior que Ronilson ocupó el cargo para controlar la recaudación de impuestos, algo que le habría posibilitado actuar en la "mafia del ISS", un esquema de cobranza de sobornos que puede haberle causado un perjucio de 215 millones de dólares a las cuentas de la ciudad.

"Folha optó por transcribir la declaración del fiscal de forma literal, ya que él no citó ningún nombre y ejerció funciones de importancia tanto en la gestión actual como en la anterior", dice la Secretaría de Redacción.

El exceso de cuidado quedó solo en el titular, ya que la hipótesis de que la frase del fiscal pudiese ser una referencia a Haddad no fue explorada por la nota. El "otro lado" fue solo con Kassab, que clasificó las declaraciones de falsas, pero no pensó en que el fiscal pudiera haber estado hablando de otra persona.

El diario fue muy estricto en una cobertura delicada. El escándalo del desvío de impuestos, que salió a la luz a fines de octubre, tenía todo para rendir dividendos solo al actual alcalde. Pese a que la investigación comenzó con Kassab, fue Hadda quien reveló la existencia de la banda. Fueron suficientes tres días para que surgiera un gancho citando a Antonio Donato, secretario de Gobierno.

Como la investigación continua, es probable que aparezcan nuevas escuchas. Éstas no son prueba de culpa y deben ser tratadas con todo el cuidado y sin distorsiones.

SUJETO INCREÍBLE

Política fiscal, mafia del ISS, espionaje brasileño... nada de eso superó al "rey del VIP" en las redes sociales. Para quien todavía no conoce la historia, la tapa de la revista "Veja São Paulo" de la semana pasada tenía al empresario Alexander de Almeida, de 39 años, que gasta hasta 21.600 dólares por salida.

El video en el que describe los 10 mandamientos para ser el "rey de la noche" (pedir mucho champagne, incluso prefiriendo el vodka, invitar a famosos para "darle más valor" al VIP, fue visto más de 4.000.000 de veces.

El informe provocó indignación, seguido de incredulidad. Primero, la revista fue condenada por destacar la frivolidad, a "despilfarradores" que "no contribuyen a hacer una sociedad mejor".

Es una crítica comprensible, aunque no puede negarse la enorme curiosidad que envuelve la vida de los ricos. Además de eso, en un país de enormes desigualdades, no deja de ser relevante exponer los extremos.

El video, pese a que no tiene ni una palabra de crítica, dejó a Alexander como un tonto. Él aparece dentro de su armario recitando nombres de marcas, estacionando su Ferrari en la calle y bailando apoyado en uno de sus guardaespaldas. La banda sonora es "The Super Rich Kids" (Frank Ocean). No aparece ningún periodista, es como si solamente la cámara estuviera prendida, pero es evidente de que alguien orientó la entrevista con malas intenciones.

En el final, el empresario atribuye posibles críticas a la "envidia". En un acontecimiento que solo fue posible dentro el admirable nuevo mundo de internet, Alexander intentó desmentir la nota. A la radio Bandeirantes le dijo que eso no era "real" sino una "broma". No confirmó su nombre.

Rápidamente se extendió la versión de que "Vejinha" había sido "engañada" por un personaje inventado por el programa de televisión "Pánico". La revista respondió en su sitio en internet y dijo que el informe era verdadero y que "cualquier semejanza con personas reales no era mera coincidencia". Los problemas para Alexander crecieron ya que la revista reveló que perdió clientes, no aguanta más las "bromas" y está con miedo de volverse blanco de un secuestro.

Alexander era el estereotipo perfecto del nuevo rico que mucha gente dudó que fuera verdadero. En la misma semana, el columnista Antonio Prata creó en Folha un estereotipo de derecha, con un discurso extremamente caricaturesco y mucha gente lo creyó verdadero. Él tuvo que explicar que se trataba de una ironía.

Tiempos extraños los que vivimos, en donde la prensa tiene que ser explícita acerca de lo que es real y lo que es ficción.

Traducido por NATALIA FABENI

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