Las últimas galerías de fotos
Mercado Brasileño
11h24 Bovespa |
+1,26% | 126.224 |
16h43 Oro |
0,00% | 117 |
11h27 Dólar |
-0,94% | 5,1150 |
16h30 Euro |
+0,49% | 2,65250 |
PUBLICIDAD
Alter do Chão, en el estado de Pará, considerada una de las playas más lindas del mundo
07/08/2014 - 14h27
Publicidad
ANTONELLA KANN
COLABORACIÓN PARA FOLHA, DE PARÁ
Sólo 37 kilómetros separan al aeropuerto de Santarém, en el estado de Pará, de una villa de pescadores que tiene el poder de sorprender a quien ya recorrió Brasil y todo el mundo.
Aunque Alter do Chão es un nombre poco difundido en Brasil, ya fue elegido por el diario británico "The Guardian" como la playa más bella del país, el Caribe brasileño.
El destino está enmarcado por playas de arenas blancas en las márgenes del río Tapajós, que, de tan ancho, parece un mar de aguas cristalinas, calmo y sin olas.
El estilo de vida es sencillo y no hay pretensiones de transformar Alter en un destino pop. Sin embargo, el ambiente se volvió más ecléctico en el último tiempo, desde que los extranjeros -principalmente europeos- comenzaron a llegar a este lugar. Muchos decidieron instalarse y montar pequeños negocios.
Ese flujo hizo también que comenzaran a aparecer pequeñas posadas bien arregladas. Todo esto, de a poco, fue agregándole pequeñas dosis de encanto al ya pintoresco escenario de Alter y, claro, ayudó a incrementar la infraestructura turística.
Al anochecer, una torre de Babel en miniatura se concentran alrededor de la placita principal del lugar, en donde puede escucharse hablar en español, inglés, francés e italiano, todo mezclado con el ritmo del carimbó, un género musical difundido en todo el estado.
CARURU Y TACACÁ
Paseos en barco y visitas a pequeños ríos que corren entre islas están entre las excursiones obligatorias. Cuando no es el río el que atrae a los turistas, el foco se vuelve hacia los negocios con artesanías y los puestos para comer y beber, restaurantes, bares, el pequeño supermercado, la iglesia y farmacia.
Allí, el movimiento es constante, incluso al mediodía, cuando el calor sofoca. Si la intención es ir de compra, las artesanías indígenas son las más interesantes.
La sintonía entre diferentes culturas aparece también en la gastronomía, con menús en portugués, y en otros idiomas. Se puede degustar desde un caruru incrementado (una sopa hecha a base de gombo con pedazos de pollo o carne) y postres osados como un cheesecake servido en una copa con castañas de Pará.
Si busca algo más legítimo, puede optar por probar un tacacá, un plato indígena con tucupí (caldo a base de mandioca) y camarón seco.
Traducido por NATALIA FABENI
+Últimas noticias en español