En menos de un año, tres empleados del Ministerio Público de São Paulo (MPSP) se quitaron la vida. Dos de estos casos ocurrieron en menos de 24 horas.
Funcionarios denuncian que compañeros enfermaron por el deterioro de su rutina laboral, con sobrecarga de actividades, presión, plazos cortos y acoso. La jefatura del órgano asegura que los casos fueron puntuales, de personas con problemas personales.
El primer suicidio se produjo el 29 de junio de 2022. Un analista jurídico se suicidó en el edificio de la institución, sus compañeros fueron testigos. Una denuncia interpuesta ante el Consejo Nacional del Ministerio Público informó que temía perder su trabajo tras ser diagnosticado con depresión.
El segundo caso, un director de ingeniería, tuvo lugar el 10 de mayo. Estaba en casa, de baja, después de que le diagnosticaran depresión. Allegados aseguran que había sido presionado para cumplir las demandas.
Al día siguiente, el fiscal auxiliar del Centro de Administración y Transportes se suicidó en una camioneta del MPSP durante un viaje al interior. Los colegas fueron a almorzar. En el camino de regreso lo encontraron en el vehículo, sin vida. Los informes revelan que la función exige mucho, pero paga poco.
El fiscal general del MPSP, Mário Luiz Sarrubo, asegura que investigó si los empleados fueron víctimas de acoso o tuvieron problemas en sus cargos y la conclusión fue negativa.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA