El Gobierno de Rio admite que no sabe lidiar con protestas

19/07/2013 - 09h12

A cuatro días de la llegada del papa Francisco, los responsables de la seguridad en Rio de Janeiro reconocieron que no saben cómo actuar contra los grupos de manifestantes que están enfrentándose con la policía y promoviendo actos de vandalismo en la zona sur (y rica) de la ciudad.

Durante la madrugada del jueves un grupo que había participado en un acto frente a la casa del gobernador Sérgio Cabral, en el barrio de Leblon, destrozó por lo menos 25 establecimientos comerciales tanto en Leblon como en Ipanema, saqueó una tienda de ropa masculina, destrozó teléfonos públicos, placas de señalización y levantó barricadas en las calles del barrio incendiando montones de basura.

Nueve personas fueron detenidas y denunciadas por formación de cuadrilla -asociación ilegal-. Una de ellas también fue acusada de porte de artefacto explosivo.

La escalada de violencia en las protestas preocupa a los encargados de garantizar la seguridad del pontífice durante su visita, que comienza el lunes.

Por lo menos seis manifestaciones se han convocado durante la estancia del Papa en la Jornada Mundial de la Juventud. De acuerdo con el secretario de Seguridad, José Mariano Beltrame, la actuación en las protestas exigirá un "tratamiento diferenciado".
"No podemos tener una planificación rígida, porque esas manifestaciones son flexibles.

No hay informaciones suficientes para hacer una planificación como puede hacerse en un evento formal", dijo Beltrame.

A pesar de que los ministros de Justicia, José Eduardo Cardozo, y de Defensa, Celso Amorim, participaron el miércoles en una reunión en Rio para intentar convencer a los representantes del Vaticano de la necesidad de reforzar la seguridad del papa, el jueves, el general José Abreu, representante de las Fuerzas Armadas en la seguridad del evento, dijo que las protestas no van a exigir revisar de nuevo el esquema.

"Ya trabajábamos con la posibilidad de movimientos contestatarios. Nos sorprendieron las protestas durante la Copa de las Confederaciones, pero manifestaciones intimidatorias y actos terroristas ya estaban en nuestro abanico de preocupaciones", dijo Abreu.

Beltrame dijo además que la policía está "aprendiendo" cómo actuar en cada manifestación. "La solución es intermedia. Estamos aprendiendo en ese proceso con cosas que no conocemos: cócteles molotov y personas enmascaradas", dijo el secretario.

Traducido por MARÍA MARTÍN

Lea el artículo original