Que es necesario aplanar la curva de contaminación por el nuevo coronavirus para evitar el colapso en los hospitales y, como consecuencia, en el sistema de salud, pocas personas discrepan. ¿Pero qué curva es esta?
Científicos brasileños sugieren que, de hecho, hay dos curvas: la de los más ricos, ya algo más controlada, y la de los más pobres, que está en crecimiento. Esto significa que las medidas de aislamiento tienen menos apoyo entre las clases más altas y que existe una mayor presión para relajar las restricciones, poniendo en riesgo a los más pobres.
Esto es lo que revelan los investigadores Guilherme Lichand (profesor de la Universidad de Zurich), Onício Leal-Neto (becario postdoctoral en Zurich) y Guilherme Prokisch (matemático de la USP) en un artículo que analiza datos de una plataforma que intenta desvelar el avance del virus, de acuerdo con los síntomas informados por la población.
Los datos recopilados por los investigadores muestran que las personas de las clases sociales A y B (con ingresos familiares superiores a R$ 8.159) informan que tienen cada vez menos síntomas. Las clases D y E (ingresos inferiores a R$ 1.892) relatan más síntomas a lo largo de las semanas.
Al observar los datos de dónde se encuentran estas personas con la mayoría de los síntomas de la enfermedad, se observa una mayor concentración de casos sintomáticos en las regiones más vulnerables de la ciudad.
"Es natural esperar que, a la luz de esto, la presión de las clases altas para reabrir la economía se vuelva más intensa, con costos potencialmente altos para aquellos que aún están expuestos a la curva creciente de casos, y sin las mismas condiciones para acceder a equipos de salud con capacidad suficiente para satisfacer la alta demanda", concluye el informe de los investigadores.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA