El cacique Raoni Metuktire, de 90 años, fue dado de alta y regresó a su aldea, en el Parque Nacional Xingu, en Mato Grosso, el pasado fin de semana después de pasar nueve días en el hospital por una hemorragia digestiva.
Llevado a un hospital en Colíder, en Mato Grosso, el 16 de julio, su estado de salud se vio agravado por la anemia y tuvo que ser ingresado en un hospital en el Sinop dos días después.
Raoni fue diagnosticado con úlceras intestinales e inflamación en el colon e incluso fue sometido a una transfusión de sangre. Las pruebas para Covid-19 dieron negativo.
Al salir del hospital, agradeció la atención y las preocupaciones y, en el idioma de su pueblo, advirtió sobre el riesgo de enfermedades "repentinas".
“Ahora estoy curado, pero quería deciros que la enfermedad llega en cualquier momento y ataca a alguien de nuestra familia. Quería que todos lo pensaran y pudieran querer, querernos, respetarnos, porque no sabemos que nos deparará el mañana", dijo el jefe, antes de abandonar el hospital en Sinop.
Según el sobrino nieto de Raoni, Patxon Metuktire, la salud del jefe indígena comenzó a empeorar después de la muerte de su esposa, Bekwyjkà Metuktire, el 23 de junio, víctima de un derrame cerebral. Desde entonces, Raoni ha mostrado signos de depresión.
Al frente de la región de Xingu, el cacique es conocido en todo el mundo por defender los derechos de los pueblos indígenas.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA