Alrededor del 40% del área actual de la selva amazónica puede estar avanzando por un camino sin retorno y convertirse en sabana a fines de este siglo, de acuerdo con investigadores de Holanda, Suecia y Alemania en un estudio publicado este lunes (5) por la revista Nature Communications.
Los investigadores utilizaron modelos informáticos y análisis de datos para estimar el cambio climático, especialmente en relación con el nivel de precipitaciones.
Cuando la cantidad de lluvia cae por debajo de cierto límite, la floresta ya no puede retroalimentar la humedad, lo que hace que el paso a la sabana sea prácticamente irreversible, según los investigadores.
El objetivo del estudio es ayudar a predecir cómo la vegetación actual puede verse afectada por los cambios de lluvia, causados por los efectos de los gases de efecto invernadero.
Los científicos simularon lo que sucedería en dos situaciones extremas: 1) si desaparecieran toda las florestas del trópico, ¿dónde se recuperarían, según las condiciones climáticas?, y 2) si hubiera floresta en toda la región tropical, ¿qué áreas se mantendrían, según el clima?
Partiendo de una situación de una zona sin floresta, los investigadores notaron que, a medida que va aumentando la vegetación, ésta influye directamente en la lluvia. El vapor de las hojas se condensa y regresa a la floresta en forma de precipitación, acelerando la silvicultura y creando un círculo de más lluvia y más cobertura vegetal.
El efecto de retroalimentación también apareció en el estudio que comenzó con los trópicos completamente cubiertos de vegetación. Hoy en día hay lugares donde la lluvia no mantener un bosque tropical, y con menos cobertura vegetal, las precipitaciones también disminuyen, lo que permite la aparición de incendios, lo que reduce todavía más la región verde.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA