Fue en 2017, en la primera consulta prenatal, que la actriz y poeta Priscila Obaci, de 36 años, descubrió que era seropositiva. En aquel momento, todavía estaba amamantando a su primogénito, que tenía un año y medio.
“Fue un susto, pero comencé a tomar la medicación al día siguiente. Tres meses después tenía una carga viral indetectable. El parto fue normal, como yo quería. Mi hijo nació bonito y sano, y es un travieso”, dice.
En diez años, el país registró un aumento del 38,1% en el índice de detección del VIH en gestantes: subiendo de 2,1 casos por cada mil nacidos vivos en 2008 a 2,9 en 2018, según el boletín epidemiológico del Ministerio de Sanidad de 2019.
A excepción de la región sureste, todas las demás mostraron un aumento de gestantes portadoras de VIH. Las regiones Norte y Nordeste experimentaron los incrementos más acentuados, 87,5% y 118,1% respectivamente.
El aumento se explica, en parte, por la realización de un diagnóstico prenatal más pormenorizado. Con el uso de terapia antirretroviral (TAR) durante el embarazo, el riesgo de transmisión de madre a hijo es menos del 2%.
Traducido por AZAHARA MARTÍN ORTEGA