No hay camino único en la transición para el fin de los combustibles fósiles, para el presidente de la COP29

Mukhtar Babayev critica a los países desarrollados y afirma tener esperanza de que las elecciones en EE UU no retrasen las negociaciones climáticas

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BAKÚ (AZERBAIYÁN)

¿El mundo está listo para prescindir de los combustibles fósiles? La pregunta es formulada a Folha por Mukhtar Babayev, presidente de la COP29, la conferencia sobre clima de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) que se celebrará este año en Azerbaiyán —uno de los más importantes productores de petróleo y gas del mundo. El evento tiene como objetivo principal la formulación de una nueva meta de financiación de las acciones climáticas, pero también vive bajo una expectativa: si se presentarán avances en relación al acuerdo histórico hecho en diciembre de 2023.

Mukhtar Babayev, Ministro de Ecología y Recursos Naturales de Azerbaiyán y Presidente de la COP29. (Photo by JOHN MACDOUGALL / AFP) - JOHN MACDOUGALL/AFP

En la última COP, en Dubái, por primera vez el documento con las resoluciones finales mencionó explícitamente los combustibles fósiles. Los países se comprometieron a construir sistemas de energía que se alejen de estas fuentes contaminantes —o, como dice el texto, una "transición hacia el fin de los combustibles fósiles".

Él argumenta que su país ya comenzó su transición, enfocándose en inversión en energía verde. La COP en Bakú, que precede la edición que Brasil debe albergar en Belém en 2025, ocurre en un año rodeado de tensiones electorales, principalmente bajo la posibilidad de que Donald Trump gane las elecciones en los Estados Unidos.

"Las elecciones tienen influencia en este proceso, pero los países ya entendieron que es tiempo de avanzar con la acción climática", dice.

Desde que fue anunciado como presidente de la conferencia, ha sido cuestionado por haber ocupado cargos en la industria del petróleo —hoy es ministro de Ecología del país— y porque la COP no nombró inicialmente a ninguna mujer para su dirección.

Más recientemente, la ONG Human Rights Watch criticó el régimen del presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, por el encarcelamiento de periodistas y activistas. En este contexto, la COP de Bakú tiene como misión principal una nueva meta de financiamiento, ya que el compromiso acordado en 2009 —US$ 100 mil millones por año para los países en desarrollo— se cumplió con retraso por las naciones desarrolladas y está muy por debajo de los recursos necesarios.

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